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El INAH trabaja para abrir sus museos en Querétaro, indicó Rosa Estela Reyes García, directora en el estado del centro Instituto Nacional de Antropología e Historia.
Indicó que la institución realiza las medidas de limpieza necesarias para recibir a los visitantes.
De acuerdo con las indicaciones de la autoridad sanitaria estatal, los museos y galerías tiene autorizado abrir desde el 1 de septiembre.
Los centros INAH están enfocados en acatar los lineamientos que a nivel federal se establecieron, acoplándose a la realidad que se vive en cada estado, afirmó Reyes.
Al ser las zonas arqueológicas espacios abiertos, el INAH trabaja en los protocolos para permitir el ingreso, definir el número de visitantes que permitirá, así como las acciones para desinfectar.
Antes de la contingencia sanitaria, el Museo Regional recibía a alrededor de 10 mil visitantes al mes; la zona arqueológica de El Cerrito, a aproximadamente 6 mil, y las de la Sierra, mil. .
“El Centro INAH Querétaro tiene bajo su administración el Museo Regional de Querétaro y el Museo de Sitio, de la zona arqueológica de El Cerrito, sólo esos dos museos tenemos en el Centro INAH Querétaro.
“Zonas arqueológicas tenemos tres en la sierra: Ranas, Toluquilla y Tancama, [las cuales están] abiertas al público.
“Además tenemos otras que están en investigación, pero no abiertas al público. En Corregidora, está la zona arqueológica de El Cerrito, entonces, son cuatro zonas, dos museos y las oficinas del Centro INAH Querétaro”, detalló.
En las oficinas del centro acuden investigadores, arquitectos y abogados, para, aun en contingencia, atender denuncias, monumentos, así como solicitudes de licencia.
“Aquí y en todos nuestros centros de trabajo hemos estado funcionando con comisiones esenciales”, aseguró.
Remarcó que quienes laboran en el Centro INAH deben cumplir sus actividades dentro de las restricciones que establece la Federación, entre ellas prohibir que los sectores con mayor vulnerabilidad.
Reiretó que para poder volver a recibir a la población dentro de museos y sitios arqueológicos, “empezaríamos a tener un flujo de recurso adicional para la compra de termómetros y para habilitación de los espacios.
“Vamos a adecuar algunos espacios, todo esto requiere un presupuesto que no tenemos y que tendríamos que solicitarlo a oficinas centrales”, resaltó.