Cerca de 400 repartidores organizados en grupos de Facebook y WhatsApp han convocado a un paro o “apagón” de la aplicación de Uber los días 27 y 28 de julio, en protesta por las bajas tarifas impuestas por la plataforma.
Las medidas incluyen una desconexión total y paulatina, así como el rechazo a entregas con tarifas consideradas injustas, todo con el objetivo de enfrentar al algoritmo de Uber y mejorar sus condiciones laborales.
La táctica busca poner presión sobre la plataforma de manera sostenida y organizada, por lo que el comunicado insta a los repartidores: “No aceptes entregas, pedidos de compra y paga menores a los precios justos”.