Hay 165 menores de edad que son beneficiarios de los centros de día del DIF estatal, ya que permanecen ahí para que no estén en los mercados municipales o cruceros, mientras que sus padres ejercen en el comercio, indicó el procurador de Protección a Niñas, Niños y Adolescentes, Manuel Hernández.
“Mientras llegan con sus papás en lugar de que estén en el mercado y en la periferia, están en los tres centros de día, Nueva realidad, La Cruz y Lomas de Casa Blanca”, especificó.
Además, trabajan con las madres y padres de familia en temas de prevención del maltrato infantil; los menores reciben un desayuno, tienen acceso a internet y apoyo para tareas escolares.
Así evitan que se expongan a situaciones de riesgo o a que ejerzan una actividad laboral sin tener la edad y los permisos adecuados.
“Normalmente estamos entre 165 y 170 niños, niñas y adolescentes beneficiados de manera mensual y anualmente se traduce en una población estática”, aclaró.
Este servicio es gratuito para los menores y así se favorece su pleno desarrollo y crecimiento, y se alejan de las calles. Los beneficiarios actuales pasaban la mañana, tanto al interior de los mercados como en las inmediaciones de estos, principalmente el de La Cruz y el de Lomas de Casa Blanca, ya que estudian por las tardes.
El funcionario estatal adelantó que en próximos días van a realizar mesas de trabajo de forma regional para que se fortalezcan estos programas en lugares como Bernal y San Juan del Río, para así erradicar cualquier posibilidad de violencia infantil.
Sobre todo cuando se aproximan fechas en las que estadísticamente incrementa el número de vendedores ambulantes y muchos realizan la actividad con sus hijos.
