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De las 157 estancias infantiles que existían antes de la contingencia, actualmente 142 se mantienen operando y si bien, todos están afectados, al menos la mitad está en riego de desaparecer. dijo la representante de este sector María Teresa Osornio.
Y es que lo que ha agravado la situación es que 40% de los padres ha optado por sacar a sus hijos de las estancias, argumentando falta de recursos.
“Tenemos un 50% de las que consideran cerrar por falta de liquidez… un 50% no cuenta con ningún recurso y tenemos, encima, pagos retrasados de todos los servicios: rentas, agua, luz, incluso salarios, los cuáles estamos comprometidas con nuestro personal a cubrir”.
Remarcó, que todas las estancias infantiles se encuentran cerradas desde el 31 de marzo, pese a que son vitales para ayudar al sector económico esencial, pues muchos padres y madres de familia siguen laborando en esas que sí están catalogadas como áreas esenciales, de ahí que requieren apoyo para el cuidado de sus hijos. “En el Diario Oficial de la Federación del 30 de marzo se nos considera como esenciales, y el día 31 se nos obliga a cerrar todas las instalaciones”.
Los embates sufridos obligan a solicitar al gobernador del estado que contemple al sector prioritario, para que pueda reactivarse al mismo tiempo que lo hagan los considerados como esenciales.
Indicó que ya se buscaron encuentros con el ayuntamiento de Querétaro, específicamente con el alcalde Luis Nava, pero sin que se generan los resultados esperados. “Tuvimos una (reunión), vía electrónica, con Luis Nava, para preguntarle cuándo podíamos operar como estancias propiamente. Él no nos da ninguna respuesta. También tuvimos acercamiento con Ignacio Eduardo Espinoza Lara, director de Protección contra Riesgos Sanitarios (del estado), y ninguno de los dos nos ha dado resolución acerca de nuestra situación… Hoy nos dirigimos al gobernador Francisco Domínguez, que nos permita hacer nuestro trabajo”.
Se trata de un sector que contribuye a la vida económica del estado, y genera un importante impacto en beneficio de la población, ejemplo de ello es que siempre han operado aún por debajo de los precios que manejan las guarderías subrogadas al IMSS.
Ahondó que mientras una subrogada recibe 3 mil 700 pesos mensuales por cada niño, las estancias infantiles manejan precios muy por debajo, que van de los mil 600 a 2 mil 500 pesos. Las cifras se determinan por diferentes factores, entre ellos los servicios que proporcionen y el lugar en el que se encuentran.
Declaró que los precios que manejan es un claro ejemplo de que las dueñas de las guarderías tienen como prioridad ayudar a la comunidad.
