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Todavía se trabaja en los calendarios para que los inspectores puedan salir a hacer revisiones en los establecimientos y verificar que ya no se usen popotes plásticos, reconoció el secretario de Desarrollo Sostenible, Genaro Montes.
Aseguró que al momento, tres días después de que fuera vigente esta normativa, no han entregado ninguna amonestación o recibido alguna denuncia ciudadana.
Señaló que en un mes se podría dar inicio con las visitas aleatorias a los más de 5 mil establecimientos comerciales que podrían repartir estos productos, así como a dar seguimiento a las denuncias ciudadanas que se reciban a través del número telefónico 070.
“No ha habido amonestaciones o apercebimientos, no se busca a quién está mal para sancionar y cobrar multas. El origen y objeto es una cuestión de conciencia cívica, si no la asumimos como tal y lo vemos como un castigo, no se podrá hacer el cambio real”, expresó el funcionario municipal.
Explicó que cuando se inicie con los recorridos de inspección, cada uno de los elementos se tendrán que identificar con su credencial del gobierno municipal ante el dueño o el encargado del comercio. Una vez que se acredita la autoridad se va a levantar un acta en la que se registre el motivo de la visita, de encontrar algún artículo se verificará si es biodegradable o de plástico.
Si los popotes encontrados son de plástico se levantará el acta en conjunto con el dueño y tendrá un plazo de cinco días para dar respuesta y explicar por qué tenía ese tipo de popotes o si los llevó el cliente.
“El dueño entregará una ficha con el tipo de popote que usa o la situación, y se buscará en la base de datos si cuentan con características de biodegradabilidad, cuando pasa la parte de la respuesta puede haber dos situaciones: que sean propiedad de los clientes, sean biodegradables o plástico reutilizable; si son de plástico se le hará una amonestación con un escrito en el que se solicita su cumplimiento al reglamento y genere una conciencia al cuidado del medio ambiente”, especificó.
Montes agregó que, si existe reincidencia cuando se haga otra visita o a través de las denuncias ciudadanas, podrá generar una infracción económica, si persiste en no ayudar en crear conciencia ambiental se procederá al decomisó de los popotes, en casos extremos de reincidencia se podría revocar la licencia de funcionamiento o no otorgarla el próximo año por no cumplir con la normatividad ambiental.
“Estamos en una etapa de arranque, vamos esperar un mes para saber cómo se comporta, porque a lo mejor en tres días las denuncias que llegaron apenas las estamos procesando, en caso de que hayan llegado denuncias (…) es importante invitar a la gente, ciudadanos, restauranteros a concientizar a dejar de usar por popotes”, finalizó el funcionario municipal.