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Durante el 15 de septiembre, autoridades de Protección Civil, Saud y Seguridad Pública intervinieron fiestas hasta de 400 personas en diferentes municipios del estado; en San Juan del Río, incluso, se suspendió una pelea de gallos que concentraba a 200 personas.
Gabriel Bastarrachea Vázquez, director de la Coordinación Estatal de Protección Civil, explicó que los operativos fueron disuasivos, tuvieron el objetivo de invitar a las personas a regresar a sus hogares y evitar aglomeraciones que favorecieran los contagios de Covid-19.
Los operativos se aplicaron en las principales plazas públicas de los 18 municipios, además de atender llamados a la línea de emergencia 911; participaron, en apoyo del área de Protección Contra Riesgos Sanitarios de la Secretaría de Salud, personal de la Coordinación Estatal de Protección Civil, Policía Estatal y las coordinaciones de Protección Civil y Seguridad Pública de los municipios.
Participaron más de mil elementos de todas las instituciones mencionadas, y las acciones las terminaron pasadas las 00:00 horas del miércoles 16 de septiembre.
“Esto fue con el objetivo de invitar a la población a evitar organizar y asistir a reuniones con concentraciones masivas durante los festejos del 210 aniversario del grito de independencia (…) se invitó a la ciudadanía a respetar las medidas de salubridad establecidas por la Secretaría de Salud”, indicó el funcionario estatal.
El director de la Unidad Municipal de Protección Civil de Querétaro, Carlos Rodríguez Di Bella, explicó que en El Rocío se realizó una fiesta con más 150 personas donde había niños, adolescentes, adultos mayores y se mostraron renuentes a concluir el festejo.
“Fuimos recibidos por gritos y chiflidos por parte de los asistentes, demostrando una gran inconformidad al dar concluida su fiesta”, puntualizó.
En esa misma colonia, así como en la Reforma Agraria y Lomas de Casa Blanca confiscaron 36 kilogramos de pirotecnia.
De acuerdo con información emitida por comunicación social de El Marqués, en la comunidad El Colorado se canceló una fiesta con más de 400 personas que se reunieron después de una caravana de camionetas; fueron renuentes, pero accedieron a dar por concluida la reunión.
En la misma demarcación en Hacienda Atongo se intervino en un evento mexicano con más de 90 personas; el aforo se redujo en un 50% y solo quedaron las personas que comprobaron ser huéspedes del lugar.
