Desde que comenzaron las obras en la calle Pino Suárez, los comerciantes ubicados en esta vialidad reportan una baja de 80% en sus ventas, debido a que los clientes evitan transitar por la zona.

Para muchos de los locatarios, estos trabajos podrían ser la estocada final, pues aún no se recuperaban de las pérdidas económicas provocadas por la pandemia, cuando las autoridades comenzaron a intervenir la vialidad.

“Las ventas están malísimas, prácticamente bajaron  80%, y es entendible porque la gente no puede pasar, no hay circulación, todo está lleno de polvo, la gente evita la zona. Las pocas personas que pasan  es porque ya saben exactamente a qué negocio van. Pero no estamos vendiendo nada, de por sí veníamos de una racha muy difícil, por lo  de la contingencia, ya nomas esperamos que terminen lo más rápido posible”.

“Nosotros cerramos nuestro negocio  por tres meses y abrimos el 17 de junio, pero con las obras y como no hay gente, estamos pensando en cerrar de nuevo, porque no hay ventas”, dice Josefina Hernández, comerciante en la zona.

Los locatarios confirman que las obras fueron  consensuadas con ellos, pero están confundidos, pues a algunos les dijeron que los trabajos concluirán en dos meses y a otros que en cinco.

Durante los diálogos con las autoridades capitalinas, mencionan los comerciantes, les ofrecieron apoyos económicos de 10 mil pesos para compensar las bajas ventas; no obstante, cuando varios de ellos quisieron iniciar el trámite para recibir dicha ayuda, les dijeron que ya no había apoyos suficientes.

“Al principio nos dijeron que nos iban a apoyar con préstamos de 10 mil pesos, porque iban a ser varios meses en que no íbamos a poder vender, pero cuando varios de nosotros quisimos pedir ese apoyo nos dijeron que ya no había recursos. La ventas han bajado mucho desde que iniciaron las obras, yo creo que entre  70% y  80%, mi negocio es de comida y la gente no viene a comer aquí, prácticamente sólo preparamos comida para llevar a domicilio”, comenta José Luis Aguirre.

La intervención de la calle Pino Suárez consiste en renovar el sistema de drenaje y agua potable, así como realizar el cableado subterráneo. De acuerdo con la Asociación de Locatarios Establecidos del Centro Histórico, las autoridades se comprometieron a terminar la obra en dos meses, los trabajos comenzaron hace cuatro semanas.

En este tramo de vialidad se contabilizan más de 150 domicilios y más de 45 establecimientos.

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