Alrededor de un 70% crece la demanda de cajones de estacionamientos públicos durante los fines de semana, lo cual no es solventado por los establecimientos existentes, informó Abel Sánchez Treviño, presidente de la Asociación de Estacionamientos de Santiago de Querétaro.
De lunes a jueves la demanda que hay de cajones es de 4 mil 300 por día; sin embargo, de viernes a domingo la demanda se eleva a más de 13 mil cajones.
Especificó que en el primer cuadro de la ciudad hay 80 estacionamientos públicos con capacidad para 8 mil 500 cajones.
“Querétaro en los últimos 20 años ha crecido más de 15 veces el tamaño de la población y el parque vehicular. Dentro de ese primer anillo del primer cuadro se encuentran operando 80 estacionamientos, esos 80 tienen una capacidad de 8 mil 500 cajones”, subrayó el líder del sector.
Explicó que el objetivo de crear la asociación fue para poder dialogar todos estos asuntos y las tarifas con la autoridad municipal, ya que esto significa un límite a sus ingresos.
“Nosotros no manejamos nuestras tarifas, mucha gente piensa que cada estacionamiento pone la tarifa que quiere y no es así, quien nos pone la tarifa cada año es el municipio”, puntualizó Sánchez Treviño.
Derivado de esto, aseguró, es que tampoco crece el número de estacionamientos públicos en el primer cuadro, porque frenaba la libre demanda.
Añadió que también la actividad comercial, aun cuando tiene mucha rotación, no cuenta con los espacios de estacionamiento que por ley deberían tener.
“Muchos hoteles boutique jalan gente, pero no tiene estacionamiento, entonces ahí hay una contradicción de lo que nos pide la autoridad a nosotros, que debemos tener un cajón y no se explica que abren negocios y dicen que todos tienen cajones y no sabemos dónde están”, refirió.
Enfatizó que si hubiera la posibilidad de poner tarifas, incluso adecuado a horas pico, ayudaría a la rotación y a que este tipo de comercios tuvieran más ingresos para poderse ampliar.
“Cuando tiene rotación un estacionamiento, hay lugares disponibles, pero si maneja tarifa barata las personas se van a quedar tres o hasta 10 horas, eso impide que otra persona lo pueda hacer y eso incide en la economía del comercio”, explicó.