El peritaje realizado tras la última fuga registrada en el Acueducto II en agosto, que dejó alrededor de 60 colonias sin agua, no arrojó ningún responsable, pues se debió a un reblandecimiento del terreno, informó el vocal ejecutivo de la Comisión Estatal del Agua (CEA), Luis Alberto Vega Ricoy.

Esto en relación a la ruptura de la tubería registrada el 3 de agosto en la línea del Sistema Acueducto II ubicada en los límites entre el municipio de El Marqués y Colón, que afectó el abasto en decenas de colonias.

Al parecer no hubo una intervención ajena. Fue un reblandecimiento de la tierra según lo que dice el peritaje, ocasionado porque unas pipas estaban descargando ahí agua en un banco de tepetate y hubo un reblandecimiento, y eso causó una corrosión y filtración de agua a donde están los tubos y eso pudo causar el incidente”.

Dijo que se desconoce el origen de las pipas que vertían agua en la zona, por lo que no se pueden fincar responsabilidades, aunque recordó que existe una denuncia que se presentó ante las autoridades correspondientes desde el día de la fuga, contra quien sea responsable.

Integraremos esto al expediente y si hay algún responsable, que caiga”, pronunció. Recordó que fue el seguro el que respondió por esta afectación por lo que, para el gobierno de Querétaro no tuvo que destinar recursos para esto.

Agregó que la tubería del Acueducto II se encuentra en una zona que es un derecho de paso perteneciente a la Comisión Estatal de Aguas (CEA), en donde se ha reforzado la vigilancia y los recorridos para evitar que se pudieran presentar situaciones que dañen otros tramos de infraestructura.

Hemos recorrido varias veces el trayecto, que realmente todos los tubos están bajo tierra, entonces no se puede realmente darle mantenimiento a la red de Acueducto II porque había que escarbar y hacer todo, pero sí se han hecho recorridos para precisamente tratar de ver que no haya alguna deficiencia, suelo blando o de riesgo”, indicó.

Recordó que respecto a la primera fuga que se presentó en el Acueducto II, en diciembre de 2022, cuando una empresa que instalaba fibra óptica rompió la tubería, ya se han logrado recuperar casi 10 millones de pesos de los 18 que los seguros tienen que pagar por el daño.

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