Los negocios ubicados en el Centro Histórico de la capital queretana no se han visto afectados por la reciente plaga de roedores que se registró en las principales plazas y jardines del primer cuadro de la ciudad, ya que las fumigaciones son constantes en los comercios.
Antonio Torres Rico, presidente de la Alianza por el Centro Histórico, reconoció que el alcantarillado y el servicio de drenaje de esta zona es de los más antiguos de la ciudad y es por ello que se dan estas plagas; sin embargo, adelantó que ya se contempla un proyecto de modernización para la infraestructura.
“Las alcantarillas y el servicio de drenaje de la ciudad es de los más antiguos que tenemos y obviamente el hecho de que los roedores vivan ahí, no es un tema de ahorita, es un tema de muchos años, lo que si es que en este caso, la delegación Centro Histórico ha puesto y ha trabajado para controlar las plagas, han colocado trampas para poderlas disminuir y poder trabajar”, comentó.
En el caso de los negocios, destacó que la fumigación es parte de sus programas mensuales, para evitar que estas plagas los invadan, pues no nada más es un asunto de conciencia, sino que su licencia los obliga, aunado a que constantemente están siendo revisados por la Secretaría de Salud.
“Los negocios tienen un programa permanente de fumigación, estamos obligados, de acuerdo a nuestra licencia de funcionamiento, a poderlo hacer mes con mes. Tenemos revisión de la Secretaría de Salud y tenemos la obligación siempre de tener esos controles dentro de cada establecimiento”, agregó el dirigente.