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Con más de 58 mil árboles sembrados, el programa Respira Querétaro registra un avance de 30%, y este 2020 se fortalecerá para que sea el año en que más se trabaje a favor del medio ambiente, señaló Genaro Montes, secretario de Desarrollo Sostenible (Sedeso), quien resaltó que gracias al interés de la población, la mortandad de plantas es mínima, pues si acaso llega a 8%.
La siembra de árboles volverá a implementarse en cuanto exista un clima más favorable, pese a ello el municipio ya recibió 46 cartas, tanto personales como institucionales, de interesados en sumarse al esquema.
“Lo que nos piden es donar, pero también ha habido instituciones que más que una donación piden decir: “nos interesa participar o intervenir en alguna área verde, dotarla de servicios para poder cuidarla, poderla atender”, señaló Montes.
El interés de participar de las instituciones y empresas es porque ya cuentan con áreas de responsabilidad social, de ahí que están en búsqueda de mecanismos a través de los cuales puedan ayudar a la sociedad.
“El año pasado terminamos con más de 55 mil 800 árboles sembrados y donados para cubrir la meta, que son los 250 mil árboles que prometió el alcalde (…). Retomamos todas las acciones a finales de febrero, principios de marzo (…), ahorita, por cuestiones del frío, climáticas, no se pueden sembrar nuevos árboles, estaríamos poniéndolos en riesgo”.
Dijo que también el municipio ha recibido donativos de árboles, los últimos a través de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) y la fundación Grupo México.
Siempre se opta por sembrar unas ocho especies de árboles endémicos, entre ellos huizaches, pata de vaca y mezquites.
En otro orden de ideas, anunció que este año se iniciarán los trabajos para ajustar los planes parciales de desarrollo.
Los documentos de planeación en los que se basa el ayuntamiento se crearon en el 2009, con datos del 2005, de ahí que se trata de un documento en revisión, y que su adecuación correspondería a necesidades actuales y futuras del municipio.
La actualización debe tomar en cuenta la Ley de Asentamientos Humanos, misma que se modificó en el 2017 a nivel federal.
