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El municipio de Querétaro mantendrá entre 2020 y 2022 un balance financiero con un superávit robusto, lo que le permitirá mantener una posición de liquidez fuerte y sin carga de deuda, a pesar del lento crecimiento económico en el país y las posibles reducciones que se den en las transferencias federales.
Así lo dijo Standard & Poor’s (S&P), agencia calificadora de riesgo, en el reporte en el que confirmó las calificaciones crediticias en escala global y nacional del municipio de Querétaro.
En escala global, S&P tiene asignado a Querétaro la calificación BBB, mientras que en escala nacional cuenta con la nota mxAA+; en ambas la perspectiva es estable.
En su análisis, dice que se tiene la expectativa de que el municipio de continuará implementado políticas fiscales disciplinadas en los siguientes dos años.
“Nuestro escenario base para 2020-2022 considera que Querétaro seguirá reportando superávits operativos muy altos. Esto dependerá de su capacidad para mantener el control del crecimiento del gasto.
“Además, el desempeño de los ingresos propios del municipio dependerá en gran medida del crecimiento del sector inmobiliario, el cual podría desacelerarse”, expone la firma calificadora.
La ratificación de las calificaciones crediticias para Querétaro, explica S&P, reflejan que en su primer año la administración municipal aplicó políticas financieras que le permitieron mantener un “sano desempeño presupuestal, debido a que hubo efectivos controles de gasto”.
Además, dice que, el Producto Interno Bruto (PIB) per cápita de la capital queretana es más alto, en comparación con la mayoría de los municipios del país.
“La economía de Querétaro ha crecido de manera constante en los últimos años, lo que se refleja en un PIB per cápita de 16.117 dólares en 2018, mayor al promedio nacional. Además, Querétaro forma parte de una región que tiene un importante centro industrial, aeroespacial y automotor”, refiere.
La economía del municipio se encuentra respaldada por condiciones socioeconómicas, relativamente buenas para su población (incluye seguridad, infraestructura, mano de obra experimentada y estabilidad política).
Aunque S&P reconoce que las condiciones referidas han contribuido para favorecer al municipio de Querétaro en atracción de inversiones y generación de ingresos, también ha desfavorecido por el rápido crecimiento urbano, “lo que representa un desafío al momento de controlar el gasto”.
También, el municipio capitalino presenta ausencia de deuda pública y un bajo nivel de pasivos contingentes.
En los últimos 10 años, refiere S&P, el municipio de Querétaro han implementado políticas financieras sofisticadas, con una planeación a un plazo más largo que el de la mayoría de los municipios de este país.
Asimismo, S&P dice que el sistema de pensiones municipal actualmente no cuenta con recursos suficientes; “sin embargo, los costos anuales representan un pequeño porcentaje del presupuesto anual, alrededor de 2% de los ingresos proyectados y el municipio espera que este indicador se mantenga estable. Además, sus pasivos contingentes son bajos y están relacionados con algunos laudos, cuyo pago no supera 2% de sus ingresos”.
