Cada año en Querétaro se tratan en promedio 51 hectómetros cúbicos de agua residual, señala el informe Modernizar la Regulación de Aguas en México, dado a conocer por el Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO).
Con este indicador, el estado se encuentra en el octavo lugar en la República Mexicana con menor volumen de agua residual tratada.
Campeche tiene el menor volumen de agua tratada, con únicamente cuatro hectómetros cúbicos al año, luego Yucatán con un volumen de 19, Chiapas con 39, Oaxaca con 40, Tlaxcala con 41, Zacatecas y Morelos con 45, Colima con 48, en seguida Querétaro con 51 hectómetros cúbicos al año.
Por el contrario, los estados que registran más volumen de agua residual tratada son Hidalgo con 918 hectómetros cúbicos al año, Nuevo León con 391 y Jalisco con 339, así lo señala el IMCO al tomar en cuenta información de las plantas de tratamiento municipales, del 2021, y que fue consultada en febrero de este año.
El estudio del IMCO, al momento de exponer cuáles son las barreras que hay en el marco normativo que impiden que haya una gestión más eficiente del agua, señala que una de ellas es la necesidad de tener un mayor volumen de tratamiento de aguas residuales.
Al respecto, el IMCO muestra que en el país hay dos mil 872 plantas de tratamiento de aguas residuales que están en operaciones, las cuales procesan aguas que vienen de domicilios, así como de industria y de otros usuarios que están conectados a las redes de abastecimiento público.
El instituto señala que a pesar de que el tratamiento de aguas residuales está mandatado y regulado por la ley, en México nada más se trata 5% del agua que se usa.
Asimismo, la Procuraduría Federal de Protección al Medio Ambiente (Profepa) ha detectado que uno de los problemas es que las plantas de tratamiento que operan los municipios mexicanos con frecuencia están fuera de servicio.
“A esto se le suma que el tratamiento de las descargas de agua del sector agricultura no están debidamente reguladas a causa de la ausencia de fundamentos técnicos, al no haber seguridad sobre cuál debe ser el nivel de control alcanzado por los agricultores ni cómo pueden llegar a él”, señala el informe del IMCO.
De forma general, el documento indica que en la última década se han duplicado las sequías en el país, lo que se agrava por el aumento de las temperaturas a consecuencia del cambio climático; y con las tendencias actuales la problemática podría agravarse.
En el país, el estado con mayor disponibilidad de agua es Chiapas (con 20 mil 679 m3 por habitante) y Ciudad de México tiene la menor disponibilidad (74 m3 por persona).
En este sentido, expone que hay una serie de desafíos en materia de gestión y de acceso al agua. Por ello, el IMCO analizó la regulación actual y determinó que es urgente que se apruebe una nueva Ley General de Aguas, para fomentar una gestión eficiente.
Con el diagnóstico que hizo el instituto sobre la problemática, lanzó diversas propuestas: como la necesidad de garantizar recursos suficientes para que la Comisión Nacional del Agua (Conagua) desarrolle un sistema de información de los recursos hídricos.
Además se menciona en esas propuestas que Conagua así como el Congreso de la Unión ajusten los volúmenes abiertos a concesionar para extracción de agua superficial o subterránea.
Así mismo se propone que la Conagua y la Profepa garanticen las inspecciones y vigilancia suficientes de acuerdo a los requerimientos para los sistemas de aguas.