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El Viaducto Poniente, inaugurado en días pasados, es una obra que acentúa la desigualdad social e ignora la pirámide de la movilidad, manifestó el vocero del Observatorio Ciudadano de Movilidad, Sergio Olvera León.
Destacó que los más de 730 millones de pesos que aplicó el gobierno municipal en esta obra, no están bien invertidos ya que sólo beneficia a personas que tienen automóvil y que circulan por ese punto de la ciudad, para el resto de los habitantes no significa ninguna diferencia en materia de movilidad.
“Una obra de este tipo sigue anclada en el siglo pasado, se demuestra que para la administración municipal y estatal valen más las personas que se mueven en un auto que quienes no usan este medio de transporte, en teoría las obras de gobierno deberían de servir para reducir la desigualdad y con estas obras las amplían”, expresó.
Subrayó que no está contemplado un carril confinado de transporte público en esta obra, además se abrió primero la parte del puente por donde sólo van a circular vehículos.
Olvera León detalló que ampliar vialidades responde a un fenómeno que se llama “demanda inducida”, por lo que en el corto o mediano plazo -de 18 a 24 meses- la congestión vehicular va a ser entre un 10y 45% peor de la que había antes de construir el viaducto.
“Si se quiere mejorar la movilidad, como lo vimos en la pandemia hay que sacar coches del entorno, no ampliar los caminos (...) Con esta obra no se va a conseguir mejorar la movilidad, y con esta visión los 730 millones de pesos no están bien invertidos, se pudo haber gastado en otro tipo de acciones, más transporte colectivo, incentivo a las bicicletas”, ennumeró.
Agregó que espera que en los próximos proyectos se contemplen “acciones de gobierno en materia de movilidad [que] sí se ajusten a la legislación y a la tendencia global: menos coches, más ciudad”.
