En una pequeña galería de la Cueva del Tesoro, en Cadereyta de Montes, Querétaro, la Secretaría de Cultura federal, a través de un equipo del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), recuperó uno de los pocos conjuntos de herramientas de caza prehispánicos hallados hasta ahora en México.
A continuación te presentamos una serie de fotos del tesoro encontrado en el municipio queretarano.
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Se trata de una un átlatl (lanza) de 51.5 centímetros de longitud.
Dos dardos de madera fragmentados, de 66 y 79 centímetros.
Además un par de maderos modificados culturalmente, de 135 y 172 centímetros, los cuales probablemente sean palos para excavar (digging sticks), aunque también debieron emplearse como herramientas multifuncionales.
Estas reliquias prehispánicas son muestra de cómo la caza y la recolección eran la base de la subsistencia humana en estas tierras áridas.
El hallazgo lo hizo Paulo Campos, líder de la Asociación de Espeleología de Querétaro (AEQ), junto con Héctor Fuentes, Carolina Camacho y Luis Ramos, se adentraron en la oscura caverna de Rancho Quemado, guiados por la curiosidad y el espíritu de aventura.
Lo que encontraron dentro impactó la historia arqueológica de la región.
Puedes leer aquí la historia completa.
*Con información de Miyazaqui Blanco