El presidente municipal de Ezequiel Montes, Iván Reséndiz Ramírez, informó que durante las primeras semanas al frente de la administración municipal se han identificado daños al erario que ascienden a 14 millones de pesos.
El alcalde reveló que en las cuentas de la administración municipal únicamente se encontraban 3 millones de pesos para obra pública para lo que resta del año, cifra que tendrá que alcanzar al menos el 25% del recurso anual, por lo que informó que se iniciará un proceso ante el Órgano Interno de Control para que investigue actos de corrupción.
En el cambio de administración Reséndiz Ramírez indicó que esta situación ha evidenciado anomalías que afectan la operación y transparencia en la gestión pública.
Entre las principales irregularidades está la liberación de bienes públicos: se identificaron omisiones graves en liberación de vehículos a particulares sin acreditar propiedad.
También se realizó la compra de ocho patrullas de origen chino por un monto superior a los 5.7 millones de pesos, las cuales presentaron fallas desde su entrega y no son aptas para las condiciones geográficas del municipio.
Además se detectó la emisión de licencias apócrifas y problemas con desarrollos urbanos, por lo que se están integrando carpetas de denuncia por expedición de licencias de construcción apócrifas a desarrolladores en el último mes de la gestión anterior.
“Se otorgó una licencia de funcionamiento irregular a la tienda MEX HOME, contraviniendo acuerdos del cabildo del 24 de septiembre con comerciantes locales. Además la obra pública está comprometida y con presupuesto insuficiente. Se heredó un remanente del 10% del presupuesto inicial de 34 millones de pesos, afectando la operatividad de la administración”, dijo.
Precisó que se tienen obras comprometidas por 2 millones 849 mil 957 pesos que exceden la fecha límite del 30 de septiembre, y solo se dejaron 3 millones 890 mil 518.75 pesos para proyectos en el último trimestre.
Agregó que se detectó el uso irregular de recursos financieros, pues se realizaron pagos por nueve millones de pesos a funcionarios salientes, dejando las cuentas municipales en números rojos.