Con tan sólo 13 minutos de retraso, el jefe delegacional en Tláhuac, Rigoberto Salgado Vázquez, comparece ante diputados de la Comisión de Gobierno de la Asamblea Legislativa; asegura que no tiene vínculos con el narcotráfico.
Arropado por la mayoría de los asambleístas de Morena, Salgado arranca su participación explicando la Ley de Adquisiciones para la Ciudad de México para asegurar que no tiene conflicto de intereses ni tiene relación personal o de amistad con proveedores.
Lo anterior, respecto a la asignación de contratos a favor de personas que favorecieron con donaciones para su campaña a la jefatura de Tláhuac
Dice que tampoco hubo omisiones porque el proceso de licitaciones es aprobado por un Comité y esto no está en duda.
Sin más, entra de lleno a las supuestas acusaciones que lo vinculan con el narcotráfico.
Asegura que no tiene ningún vinculo consanguíneo o de negocios.
“Mentira por más que se repita, es una falta a la verdad”.
Salgado señala que Tláhuac sufre de delincuencia, que se ha documentado y que se ha informado a las instancias competentes.
Rigoberto Salgado reviró las acusaciones sobre la presencia de mototaxis.
El político sustenta que desde 2009 es cuando surge las motos adapatadas. Que en 2010 la delegación dio a conocer un programa de regulación de bicicletas y para ello se acreditaron 177 engomodos para bici y mototaxis