El precandidato presidencial de la coalición Juntos Haremos Historia (Morena, PES y PT), Andrés Manuel López Obrador, arrancó el año con una promesa de precampaña: acabar con la guerra contra el narcotráfico y pacificar al país en sólo tres años.
“A mitad de sexenio ya no habrá guerra y vamos a tener una situación totalmente distinta, diferente, vamos a reducir los índices delictivos, ese es mi compromiso. Yo voy a conseguir la paz, ese es mi compromiso, voy a conseguir la paz y voy a terminar con la guerra, no vamos a continuar con la misma estrategia que no ha dado resultados”, dijo el dos veces candidato presidencial.
En entrevista a medios, tras concluir un evento en la localidad de Izamal, Yucatán, el precandidato presidencial aseguró que en muy poco tiempo se reducirán los índices delictivos a través del crecimiento económico, la generación de empleo y la aplicación de programas de desarrollo social.
“En muy poco tiempo vamos a reducir la delincuencia. En la medida que va a haber crecimiento económico, conforme va a ir aumentando el crecimiento y la generación de empleo, y se van a ir aplicando los programas de desarrollo social, también va a ir bajando la delincuencia en el país”, aseveró.
Calificó como muy grave la situación de inseguridad y violencia, por lo que se comprometió a enfrentar esos problemas.
El tabasqueño dará a conocer mañana el nombre de quien será su secretario de Seguridad y a los miembros de un consejo en la materia, el cual creará Morena de ganar las elecciones de este año para garantizar la paz y la tranquilidad.
Recordó que cuando fue jefe de Gobierno de la Ciudad de México redujo los delitos 30%. “Delitos que sí se denuncian, no que son parte de la cifra negra. Se redujo el número de homicidios y robos de vehículos, que son delitos que se denuncian”, explicó López Obrador.
Cada mañana, añadió el precandidato, el nuevo gobierno democrático sostendrá reuniones con el gabinete de seguridad para tomar decisiones e informará todos los días a los mexicanos, porque actualmente esa función es delegada.
López Obrador aseguró que su vida no corre peligro en el proceso electoral y por ello no pedirá resguardo de ningún tipo.
“El que lucha por la justicia no tiene nada que temer, no está riesgo mi vida porque no le hago mal a nadie y por eso no traigo guardaespaldas, carros blindados y viajo solo”, dijo.
El tabasqueño comenzó el año en un evento en la localidad de Izamal, Yucatán, donde advirtió que 2018 será histórico porque Morena ganará la Presidencia de la República.
Afirmó que en menos de seis meses se registrará la cuarta transformación del país.
“Nuestra lucha tiene como antecedentes a las tres grandes transformaciones que ha registrado la historia de nuestro país: la Independencia, la Reforma y La Revolución convocada en 1910. Ahora de manera pacífica buscamos, entre todos y desde abajo, llevar a cabo la cuarta transformación de la vida pública de México”, expuso.
A la pregunta de los reporteros sobre la carta que publicó Javier Sicilia sobre su propuesta de dar amnistía a criminales, López Obrador explicó que tiene razón al expresarse.
“Yo nunca voy a cometer una injusticia, yo tengo principios e ideales. No voy a afectar a nadie, nunca le hecho daño a nadie, voy a gobernar para el pueblo”, dijo.
El tabasqueño aseguró que este año no habrá crecimiento económico en México, “se aumentará la inflación en 2018, porque aumentarán los precios de la gasolina y el diésel, entonces no será un buen año en lo económico, pero ya falta muy poco para que cambien las cosas en el país”.
López Obrador reiteró que, de ganar la Presidencia, se cancelará la reforma educativa y habrá plan educativo, pero sobre todo, se respetará a las maestras y maestros.
Reconoció que en Yucatán no hay tanta inseguridad debido a que se ha conservado la cultura, la cual tiene que ver con la ayuda mutua, respetar al prójimo, la vida comunitaria y la integración de la familia.
Detalló que amaneció en el estado de Yucatán, donde se cargo de energía positiva para aguantar la guerra sucia, pero tiene claro que se necesita un cambio.