Cuernavaca, Mor.— Luego de que EL UNIVERSAL dio a conocer el regreso de la maestra Elba Esther Gordillo al Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE), el presidente electo, Andrés Manuel López Obrador, pidió que no haya imposición en la elección de líderes laborales, y prometió que en su gobierno no habrá protegidos.
Tras un encuentro con el gobernador de Morelos, Cuauhtémoc Blanco, López Obrador dijo —a pregunta sobre el regreso de Gordillo— que se tiene que garantizar que en la elección de los dirigentes se respete el voto libre y secreto, no imponer líderes, porque “ya se terminó esa etapa”.
“Nada de imposición, nada de cacicazgos. Son los ciudadanos los que eligen libremente a sus representantes, esas son las nuevas reglas, no hay protegidos del gobierno.
“Tiene que haber democracia sindical, que los trabajadores elijan a sus representantes”, expresó.
Los gremios, dijo, no deben estar apoyados por el gobierno, “los líderes sindicales no deben representar al gobierno, tienen que luchar por los trabajadores”.
El Gran Diario de México publicó en su edición del pasado 4 de octubre que la maestra Elba Esther Gordillo Morales prepara su regreso a la dirigencia del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE).
Apenas el 7 de agosto, la maestra fue exonerada de los cargos que le imputó la Procuraduría General de la República (PGR), y la ex lideresa del SNTE ya hace los amarres con su equipo cercano.
De acuerdo con fuentes consultadas por EL UNIVERSAL, el momento clave para el regreso de Gordillo Morales a la presidencia del SNTE se ubica en la reanudación del Congreso Nacional del magisterio de 2013, cuando ella estaba aún al frente, antes del mes de noviembre próximo.
Para ello, esperan el fallo del Tribunal Superior de Justicia Administrativa (TSJA). De lograr el aval, Elba Esther Gordillo Morales será la presidenta legal y constituida, para convocar a un Congreso y así nombrar a un sustituto: el maestro Moisés Jiménez, uno de los operadores de las redes progresistas de Andrés Manuel López Obrador, presidente electo.
Días antes del arranque del pasado proceso electoral, EL UNIVERSAL dio cuenta que Fernando González Sánchez y René Fujiwara, yerno y nieto de Gordillo Morales, se habían sumado como miembros de las redes sociales progresistas de Andrés Manuel López Obrador, entonces precandidato de la coalición Juntos Haremos Historia (Morena, PES y PT).
Ambos se mantuvieron con bajo perfil durante la pasada elección acompañando a López Obrador, pero operaron las redes de apoyo con bases magisteriales leales a la maestra.
Presos políticos
En su gira por Morelos, López Obrador ofreció un mitin en el centro de Cuernavaca, donde fue acompañado de la cantante Belinda, a quien hizo un reconocimiento por haber “dado la cara” en la campaña y que —según el presidente electo— sufrió represalias por apoyar al tabasqueño en su candidatura.
Al dar a conocer los apoyos para Morelos en el primer año de su administración, que suman 6 mil 219 millones de pesos, adelantó que a partir del próximo 1 de diciembre se dará libertad a todos los presos políticos del país.
“Ya la licenciada Olga Sánchez Cordero, futura secretaria de Gobernación, tiene la encomienda de hacer una revisión y formular un planteamiento para que desde el día 1 de diciembre se les dé libertad a todos los presos políticos de México”, aseguró el presidente electo.
También se comprometió a que rescatará a las universidades públicas, luego de que la Universidad Autónoma de Morelos está en huelga desde hace más de una semana por falta de recursos.
Desde la plaza pública dio todo su respaldo al gobernador de Morelos, Cuauhtémoc Blanco Bravo, a quien le levantó la mano. Esto, ante las diferencias que tuvo el ex futbolista con la presidenta nacional de Morena, Yeidckol Polevnsky Gurwitz.
“Respaldo de manera absoluta, de manera total, sin limitaciones, al gobernador de Morelos, Cuauhtémoc Blanco. No hemos tenido diferencias. Yo ya no estoy en la dirigencia de Morena, ya tengo otro asunto que tratar y llevamos muy buena relación con Cuauhtémoc. Ningún problema”, expresó López Obrador.
Incluso, cuando asuma la presidencia, uno de los primeros decretos o una iniciativa de ley que va a elaborarse y a presentar será para que el año próximo, que se cumplen 100 años del asesinato de Emiliano Zapata, el gobierno de la República declare que 2019 sea el año de Emiliano Zapata Salazar.
López Obrador pidió a sus futuros integrantes de su gabinete actuar con imparcialidad en el caso del Nuevo Aeropuerto Internacional de México (NAIM) que se construye en el lago de Texcoco.
bbg