El aspirante presidencial de la coalición Por México al Frente, Ricardo Anaya Cortés, señaló que si se demuestra que el presidente Enrique Peña Nieto cometió “actos graves de corrupción”, por supuesto que “lo metería a la cárcel” en caso de ganar la Presidencia de la República.

“Ya estuvo bueno de que haya intocables en nuestro país. Aquí el que la haya hecho la tiene que pagar, y esto incluye al presidente Enrique Peña Nieto. Si se demuestra que él [el Jefe del Ejecutivo federal] cometió actos graves de corrupción, por supuesto que sí [lo metería a la cárcel]”, afirmó el panista.

En conferencia la sede nacional de Movimiento Ciudadano (MC), al finalizar una reunión para afinar la estrategia para ganar la jefatura de Gobierno de la Ciudad de México, Anaya Cortés dijo que no tiene la “menor duda” de que el presidente Peña Nieto lo quiere sacar de la boleta electoral, debido a que quiere impunidad, “y nosotros no lo vamos a conceder bajo ninguna circunstancia”.

Responsabilizó directamente al presidente Peña Nieto por la campaña en su contra, la cual calificó de “ilegal e imprudente” por utilizar a la Procuraduría General de la República (PGR), para “difamarlo”, al pretender vincularlo con una supuesta red de lavado de dinero encabezada por el empresario Manuel Barreiro.

El ex presidente nacional del PAN reiteró que otra de las razones por las cuales el gobierno y el PRI lo quieren sacar de la contienda electoral, se debe a que su contrario de Morena, Andrés Manuel López Obrador, ya les prometió públicamente perdonarlos, “ustedes conocen los audios, ahí está lo que dijo en Tabasco, en Tamaulipas, en Acapulco, la entrevista con Jorge Ramos”.

Agregó que el tabasqueño ha sido “consistente y explícito” al decir que va a perdonar al Presidente de la República, aun en caso de que se demostrara que éste cometió actos de corrupción, “nuestra posición es exactamente la contraria”, advirtió.

Anaya Cortés dijo que en México se tienen que investigar las acusaciones de corrupción contra la actual administración federal emanada del PRI, pues son consideradas como “verdaderamente graves”, desde el tema de la casa blanca que jamás terminó de aclararse, debido a que pusieron a Virgilio Andrade, “un subordinado del Presidente”, a investigar para después exonerar a su jefe.

Además del socavón en el Paso Exprés de Cuernavaca y los recientes desvíos que ascienden a más de 6 mil millones de pesos, cuando estaban al frente a la Secretaría de Desarrollo Social (Sedesol), tanto Rosario Robles como el aspirante presidencial del PRI, José Antonio Meade.

En referencia a las declaraciones de Meade que le pide “no ser rajón y asumir responsabilidades” de las acusaciones en su contra, el panista dijo que mejor debería responder las denuncias penales en su contra.

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