Los consejeros independientes de la Comisión Federal de Electricidad (CFE) intentaron influir no sólo en la designación del nuevo director de la empresa productiva del Estado, sino también para que no salieran ni renunciaran de la compañía directivos con puestos “clave”.
Cinco meses antes de que el presidente electo, Andrés Manuel López Obrador, nombrara a Manuel Bartlett como director de CFE para el nuevo gobierno que tomará las riendas el 1 de diciembre, los consejeros expresaron al Consejo de Administración que se les “permitiera comentar y opinar sobre el nombramiento” y hasta propusieron el perfil del funcionario que debería estar al frente de la firma.
En el acto del consejo del 22 de febrero, y ante el secretario de Energía, Pedro Joaquín Coldwell, y el director de la CFE, Jaime Hernández, los consejeros elaboraron una “reflexión” de siete cuartillas con motivo del ambiente de competencia al que se enfrenta la empresa, así como el cambio de administración”.
Luis Fernando Gerardo de la Calle Pardo, Rubén Flores García, Enrique Jesús Zambrano Benítez y Blanca Avelina Treviño de Vega, expresaron que “en el entendido de que es facultad del Ejecutivo Federal —el nombramiento del nuevo director—, se les permitiría comentar y opinar del nombramiento”.
Indicaron que el fortalecimiento de la empresa es clave, “pero más aún en el contexto del primer cambio de gobierno federal. Por primera vez, la CFE confronta el cambio de administración en su carácter de empresa productiva del Estado y, por tanto, no debe estar sujeta a los reacomodos de personal asociado a los ciclos políticos”.
Detallaron que el nombramiento al cargo de director general de la CFE recae en el Ejecutivo, pero “un plan de sucesión como parte de un programa de administración de talento bien diseñado y ejecutado asegura contar con talento interno para ser considerado para la dirección”.
Currículum en la mesa
Los consejeros independientes hicieron referencia al perfil del nuevo director: “Deberá contar con experiencia en áreas financieras y manejo responsable de presupuesto, sobre todo porque la CFE es una de las empresas más grandes del país, con un índice elevado de endeudamiento.
“Que conozca el sector energético [combustibles y electricidad], para optimizar la operación.
“Que cuente con experiencia en la detección y desarrollo de nuevos negocios, para aprovechar la reforma energética.
“Además, y considerando que la empresa cuenta con más de 90 mil trabajadores es deseable que cuente con experiencia en el manejo de recursos humanos”.
En la sesión 23 ordinaria del máximo órgano de gobierno de la CFE, los consejeros dieron lectura a esta reflexión y entre los principales comentarios señalaron la importancia de tomar en cuenta las habilidades gerenciales del personal directivo.
Señalaron que “una rotación
de naturaleza no técnica o económica puede ser contraproducente para la empresa”.
Por ello, los consejeros plantearon “la continuidad de puestos directivos clave”.