Después que el lunes por la noche se registraron enfrentamientos entre dos grupos rivales en el penal de Cadereyta, sin que la situación pasara a mayores; la mañana de este martes hubo nuevos disturbios de mayor magnitud, donde una persona perdió la vida por lesiones de arma blanca.
Los reos incendiaron colchones y otros objetos, en el túnel de acceso, para impedir el ingreso de las fuerzas policiacas, por lo que ahora no se sabe el saldo final que dejó la violencia presuntamente en protesta por el trato que recibe de los directivos dentro del penal.
En los hechos de anoche, informó un vocero del gobierno estatal, la situación fue controlada en menos de una hora, con la presencia de elementos de Fuerza Civil que acudieron en 15 patrullas en apoyo a los celadores del reclusorio, y el saldo, de uno o dos heridos con lesiones leves.
Sin embargo, horas después que las fuerzas policiacas se habían retirado, se volvieron a presentar nuevos disturbios en los ambulatorios llamados Ampliación y Apodaca, con algunos internos encima de los techos que desplegaban mantas de protesta.
Esta vez aunque hubo mayor despliegue de elementos de Fuerza Civil, Policía Militar y Policía Federal, los elementos policiacos no pudieron ingresar en primera instancia, debido a que los internos prendieron fuego a colchones en el túnel de acceso.
Familiares que permanecen en el exterior del penal, esperando tener noticias de las autoridades sobre la situación, temen que pudiera haber más internos heridos o incluso muertos, debido a que presuntamente se escucharon disparos y se presume que más presos participan en el amotinamiento.
La situación empezó a controlarse cerca de las nueve y media de la mañana, luego que los internos dialogaron con el secretario de Seguridad Pública del Estado, Arturo González, lo que permitirá conocer la situación que impera en el interior y el saldo actualizado de los disturbios.