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En entrevista con EL UNIVERSAL, el titular de la Coordinación Estratégica Electoral del PAN dice que tras la renuncia de la ex primera dama habrá partido sin los Zavala ni los Calderón.
Niega que el Frente Ciudadano por México esté debilitado. Asegura que van en la ruta de ganar la Presidencia en 2018.
Responde a si Ricardo Anaya podría o no ser candidato del Frente. “Podría o no, tal cual, anticipo que no será en este mes”.
Acota que aún faltan varias etapas para que haya una decisión que sólo Anaya podrá tomar. Sobre las peticiones para que renuncie, Creel afirma que mientras el líder del partido no tome su decisión, tiene todo el derecho de continuar en su puesto.
De los candidatos independientes, celebra su proliferación; sin embargo, advierte que denunciarán cuando vean que alguno sirve al PRI, “como patiño” o para dividir a la oposición.
¿La salida de Margarita Zavala significa un cisma en el PAN?
—Lamento su salida, aprecio y reconozco su trayectoria en el partido en los distintos cargos que ha ocupado; no obstante, el PAN es una institución de 78 años, mucho más grande e importante que cualquiera de sus liderazgos, por más importantes que sean.
Es lamentable, pero es algo que en otras ocasiones ha ocurrido con personajes igualmente estimables y el partido perdura.
La institución está hecha no solamente para ser un instrumento de la vida pública en la República, sino para perdurar y es lo que buscamos los que estamos en la actual dirigencia, que perdure, se preserve y fortalezca.
¿Ricardo Anaya y los miembros del CEN han cooptado los órganos del partido, además de tomar decisiones cupulares?
—Son críticas infundadas. Hay que recordar que los miembros del CEN somos una planilla, que surgimos de una elección abierta a la militancia, que surgimos de una votación de casi medio millón de integrantes. Traemos el mandato de todos, que se traduce en reglas, en estatutos, facultades, responsabilidades y en los distintos órganos que tiene el partido.
¿El PAN no se ha convertido en el PRI?
—Es simplemente desconocer nuestras reglas y estatutos. Lo que no vamos a permitir nunca es que prevalezca el interés de alguien.
¿Qué opinión le merece que equiparen a Anaya con Andrés Manuel López Obrador, [como lo hizo José Luis Luege]?
—Tomo esa expresión de las circunstancias de que alguien se está saliendo del partido para buscar competirle al instituto desde una candidatura independiente, es en ese contexto que se da el mensaje y, por lo tanto, el contexto descalifica ese calificativo.
¿Ve un desmoronamiento en el partido?
—De ninguna manera. Acabamos de ver una encuesta que publicó Buendía & Laredo, que se levantó el fin de semana que acaba de concluir, en la que claramente el PAN y el Frente Ciudadano por México van adelante en las encuestas, está consolidado. No se ve que esta salida haya mermado en las preferencias electorales. Vamos a buscar que se acrecente y que el Frente nos permita regresar a la Presidencia de la República en 2018.
¿Hacia allá va el PAN?
—Estamos determinados en eso, no nos vamos a quedar estancados en este episodio.
¿La salida de Zavala es hacerle el juego sucio al PRI?
—Es algo que sin duda pueden aprovechar el PRI y López Obrador, no lo vamos a permitir. Esta salida y la idea de fragmentar a la oposición de esta manera no le servirá al PRI. Vamos a crear todas las salvaguardas para poder contrarrestar esta situación.
¿La renuncia de Margarita Zavala no enciende focos rojos al interior del partido?
—Es algo que llama la atención; sin embargo, hay que decirlo con mucha claridad, esa atención debe canalizarse por la vía institucional y de acuerdo con nuestras prácticas y procedimientos internos.
El senador Ernesto Cordero ha dicho que Anaya no representa al panismo de tradición.
—Tengo un punto de vista distinto. Él fue votado por toda la militancia. Anaya tiene todas las facultades y responsabilidades, y cuenta con resultados muy exitosos de su gestión, simplemente las siete gubernaturas de 2016 y en esta última, las que ganamos. En Coahuila, Veracruz y Nayarit hubo triunfos muy contundentes.
Él recibe al partido y lo entrega con casi nueve gubernaturas, en adhesión a las que teníamos desde antes de su gestión.
¿Considera que Ricardo Anaya debió dejar la presidencia para evitar parecer juez y parte?
—Están muy claras las reglas que están avaladas por la Asamblea y que están en los estatutos, en los que claramente se establecen los tiempos y las normas de lo que son los procedimientos internos, particularmente para aquellos que quieran ser candidatos; sin embargo, el presidente del partido no ha tomado su decisión y en tanto no la tome tiene todo el derecho de conducir la institución.
¿Podría Anaya ser el candidato del Frente Ciudadano?
—Podría o no, tal cual, anticipo que no será en este mes, ni probablemente en el próximo cuando entremos de lleno a resolver la tercera etapa del proceso, quiero decirlo con toda claridad. La situación que se vivió con Margarita desafortunadamente es una que no se podía resolver la semana pasada, semanas anteriores, meses anteriores o dos años, que quede muy claro.
¿Hay PAN para mucho rato sin los Zavala-Calderón?
—Si ha habido Partido Acción Nacional por 78 años sin otros personajes, puede haber por muchos años, espero que por bastantes siglos después. Quedan muchas figuras que son muy importantes dentro de este instituto político.
¿Cómo será ahora la relación con Felipe Calderón?
—Una relación política, partidista, respetuosa y de diálogo abierto, pero con una clara definición que es la piedra de toque de todo lo demás, que la definición sea por el PAN, para fortalecer el proyecto de Acción Nacional y para apoyar a sus candidatos.
¿Temen una desbandada?
—No la ha habido, ni ocurrirá.
¿No hay de qué temer?
—No digo que no estemos atentos y por supuesto con un diálogo abierto, porque Margarita tenía simpatías dentro del partido, hay que platicar con ellos para decirles que en el instituto hay un espacio de participación.
¿El PRI le tiene miedo al Frente Ciudadano?
—El Frente está fuerte, reflejo de sus integrantes, y las encuestas dicen que va adelante, dando competencia muy cerrada con López Obrador, y eso que no tenemos candidato, y aun así estamos muy competitivos para empezar la contienda, a sabiendas que el PRI se resignó a un tercer lugar. Será una competencia cerrada. Cuando tengamos candidatos, vamos a ser una opción imbatible.
