Un bebé de tan solo cuatro días de nacido fue robado frente a los ojos de su madre, la cual fue engañada por una mujer que aparentemente le regalaría ropa para el pequeño.
La Fiscalía estatal emitió una pesquisa por la desaparición de Jonathan Isaac Perea Valenzuela, “quien fue arrebatado de los brazos de su madre el 11 de diciembre de 2017, en la ciudad de Chihuahua, por una mujer desconocida, que huyó a bordo de un automóvil”, señala de dependencia.
Sin embargo, la madre del menor relató a la prensa que en realidad ella entregó al niño a esa mujer de quien se desconoce la identidad, pues cuando el bebé nació ésta le dijo que podría regalarle ropa y algunos juguetes, así que quedaron de verse en el centro de la ciudad y ahí ocurrió el plagio.
“Habló la mujer y nos citó en un hospital, pero como andábamos cargadas le dijimos que no podíamos y nos quedamos de ver en el centro. Minutos más tarde ella llegó con nosotros y estuvimos platicando durante una hora, ya que estaba esperando a su cuñado. Después de un rato nos dijo que su cuñado le había hablado y que no encontró donde estacionarse así que nos pidió que nos fuéramos a la Ocampo (avenida), que camináramos hasta la estación del transporte, la mujer ya traía cargando al bebé porque me lo pidió para verlo”, detalló Pamela Guadalupe Perea, quien estaba acompañada de la abuela del menor cuando ocurrió el hecho.
Cuando se acercaban al sitio convenido, la plagiaria adelantó el paso, abordó el vehículo y huyó a toda velocidad con el bebé en brazos, mientras la madre y abuela se quedaron entre la gente que abordaba el camión mirando cuando un hombre de unos 25 años aceleraba la marcha del auto.
Según explicaron, la mujer las había abordado cuando salían del hospital, al momento que Jonathan tenía apenas unas horas de nacido. Les dijo que un hermano de ella estaba internado pero que en breve les llamaría para volver a verse. Sin embargo no saben su nombre, dirección ni algún tipo de dato que lleve a dar con su paradero.
La Fiscalía dijo que recopiló videos de las cámaras de seguridad del hospital, del centro comercial donde se reunieron y de la estación de transporte donde ocurrió el robo del bebé.
“Se veía muy buena gente”, declaró entre lágrimas la mamá del menor.