Con 71 votos a favor, 34 en contra y tres abstenciones, el Senado aprobó esta madrugada en lo general y en lo particular la minuta que expide la Ley de Seguridad Interior, que da un nuevo marco legal a las Fuerzas Armadas en tareas de seguridad.
Ello después de una maratónica discusión de 15 horas continuas, donde la oposición acusó a la mayoría del PRI, PVEM y senadores del PAN avalaron la militarización del país, pues la norma es inconstitucional, no respeta los derechos humanos y no atiende las demandas de organismos internacionales.
La minuta, a la que se le hizo una decena de cambios, fue regresada a la Cámara de Diputados para su eventual discusión y aprobación antes de que termine el periodo ordinario de sesiones.
Foto: Berenice Fragaso. EL UNIVERSAL
La oposición se reservó el título, los 34 artículos y los cinco transitorios que integran la Ley, empero, cada reserva fue desechada por la mayoría priísta y sus aliados.
Entre los principales cambios aprobados por los senadores destacan la adición de un quinto artículo transitorio en el que se establece que 180 días después de la entrada en vigor de la Ley, los gobernadores y los presidentes municipales donde las Fuerzas Armadas realicen labores de seguridad, presenten un programa con plazos, acciones y presupuesto necesarias para el fortalecimiento de las policías locales.
La Ley señala que la intervención de las Fuerzas Armadas en estados y municipios no podrá excederse de un año, y podrá prorrogarse por decisión del Presidente si persiste la amenaza a la seguridad interior.
Entre los cambios se quitó del texto que las protestas sociales no serán consideradas como amenazas a la seguridad nacional.