Elba Esther Gordillo es una mujer “muy fuerte y entera” que podrá salir de esta circunstancia, señaló su hija Maricruz Montelongo Gordillo.
La segunda hija de la ex lideresa magisterial le llevó víveres al número 7 de Galileo, en Polanco, donde ésta sigue su proceso por lavado de dinero en prisión domiciliaria.
Al preguntarle sobre la salud y el estado anímico de su madre. Montelongo dijo: “Pues está. Es una mujer muy fuerte, muy entera y como siempre sabrá salir de esto. No lo sé (si seguirá recibiendo visitas) yo no he estado aquí. Voy apenas llegando y nada más le traje unas cosas, pero no lo sé, no sé cómo están las nuevas restricciones”, señaló.
El martes, la Procuraduría General de la República (PGR) se quejó ante un juez federal que la ex lideresa del magisterio había convertido su departamento en Polanco en una “oficina de despacho” y reclamó que sus actividades podían llegar a representar un peligro para la seguridad nacional. En respuesta, un juez federal ordenó restringirle las visitas.
Lo anterior ocurre después de que el nieto y yerno de Gordillo Morales se sumaron a la campaña presidencial de Andrés Manuel López Obrador, y tras el juicio de amparo que interpusieron profesores disidentes en contra del dirigente del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación, Juan Díaz de la Torre.
Al visitar a su madre en el penthouse del edificio de Galileo 7, en la colonia Polanco de la Ciudad de México, Montelongo Gordillo prefirió no calificar la acusación de la PGR.
“Cada quien tiene la suficiente madurez y cordura para juzgar una decisión así. Lo que yo pueda decir va a ser muy poco objetivo porque finalmente es mi madre y no puede dejar de hablar la emoción”, señaló la mujer.
Durante el día, la procesada recibió a dos de sus nietos, uno de ellos René Fujiwara, y comieron juntos mole de olla. Al ingresar al departamento se les pidió presentar comprobante de domicilio e identificación oficial, así como dejar sus teléfonos celulares fuera del departamento.
Gordillo Morales, quien vive sola en el penthouse de Polanco acompañada únicamente de una persona que la cuida y la atiende, prefirió no abordar con sus nietos el tema de su proceso judicial o la determinación de la PGR, a fin de evitarles más preocupaciones.
Aun desde su internamiento, Elba Esther Gordillo “no ha dejado de velar por la estabilidad de la nación y el Estado”, señaló su nieto, René Fujiwara Montelongo, en una publicación por Facebook.
“Lleva ya cinco años Elba Esther como su prisionera política y el gobierno no termina de entender que, aun en esa condición, ella no ha dejado de velar por la estabilidad de la nación y el Estado”, señala.
El ex diputado federal por el Partido Nueva Alianza atribuye que el gobierno federal haya retomado una “política de acoso” hacia su abuela, después de que Fujiwara ha declarado su apoyo al candidato de la coalición Juntos Haremos Historia, Andrés Manuel López Obrador.