Los usuarios del Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM) pagan una Tarifa de Uso de Aeropuerto (TUA) cada que despegan o aterrizan, recursos que no se utilizarán para ampliar la capacidad de la terminal, sino para pagar la deuda que dejó la cancelación del proyecto de Texcoco.
En todos los aeropuertos los recursos obtenidos por la TUA se destinan almantenimiento y ampliación de la terminal aérea, pero debido a que el gobierno dejó en garantía los ingresos de la tarifa para financiar la construcción de Texcoco, ahora los pasajeros serán quienes pagarán la deuda que dejó la cancelación de la obra.
De acuerdo con la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT), la cancelación del aeropuerto de Texcoco dejó una deuda de 6 mil millones de dólares en bonos y 30 mil millones de pesos en certificados fiduciarios en la Fibra E.
Por lo anterior, en diciembre del año pasado, el gobierno federal lanzó una oferta de recompra por mil 800 millones de dólares en bonos, además del pago de intereses y una recompra anual de 200 millones de dólares de los bonos garantizados por la TUA para lograr el pago total de la deuda en 19 años, de acuerdo con el documento Razones para la Cancelación del Proyecto del Nuevo Aeropuerto en Texcoco.
Rogelio Rodríguez, abogado en Derecho Constitucional y Aeronáutico, explicó que el gobierno federal recompró alrededor de 20% de los bonos emitidos y renegoció el otro 80%, por lo que la TUA servirá para pagar esa deuda.
“México es un caso único en el mundo porque todas las TUA aeroportuarias se pagan para mejorar un aeropuerto, para su expansión y mejoras, y nosotros estamos pagando para financiar la deuda de una decisión gubernamental que fue en el sentido de tirar toda la inversión y asumir la deuda”, indicó.
El abogado agregó que debido a que los recursos de la TUA están etiquetados para pagar los bonos, no se puede tomar dinero de este impuesto para construir el aeropuerto de Santa Lucía ni para ampliar el AICM, sino que toda esa infraestructura se tendrá que hacer con recursos del presupuesto federal.
En abril de 2018, el fideicomiso 80460 le pagó 56 mil 856 millones 419 mil 400 pesos a Grupo Aeroportuario de la Ciudad de México (GACM) como contraprestación por el convenio de cesión de la TUA.
En 2018, las aerolíneas también entregaron 9 mil 892 millones 523 mil 200 pesos correspondientes a la TUA, a través del fideicomiso 2172, el cual se constituyó para garantía y pago a los acreedores.
“Estamos ante una situación poco común, en la cual esta tarifa se está utilizando para algo que no es mantenimiento, mejora, adaptación o creación de más pistas que puedan dar más número de aviones por hora”, dijo Rafael Camacho, analista de Aeropuertos de Ve por Más.
El gobierno federal prometió invertir 3 mil millones de pesos en el AICM y abrir una tercera terminal, pero esto no representa un mayor número de operaciones.
Encima de todo, cara. Debido a que el flujo de la TUA es la garantía para pagar la deuda para construir Texcoco, esta tarifa se incrementó considerablemente desde 2018.
Actualmente, la TUA nacional es de 23.80 dólares y la internacional de 45.2 dólares, un incremento de 49% y 130.4%, respectivamente en comparación con la tarifa de 2014.
Esto coloca al AICM como el segundo aeropuerto con la TUA más cara a escala mundial, después de la terminal de Heathrow en Londres, Inglaterra, donde los pasajeros pagan una tarifa de 58.10 dólares.
Debajo del AICM se ubican los aeropuertos de Panamá, donde la tarifa es de 40 dólares; Bogotá, con 39 dólares; Lima, 30.40; Frankfurt, 28.40; Charles De Gaulle, en Francia, con 26.70; Santiago de Chile, con 26; Madrid, 23.50, y el de Narita, Japón, con 18.80 dólares.