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La madre de una menor víctima de abuso sexual recriminó al presidente López Obrador que se interese más por una pintura que por la violencia que vive el país y en particular por la agresión sexual que sufrió su hija de siete años de edad.
La tarde de este lunes, en la subasta de los cuadros que pintaron activistas que mantienen tomadas las instalaciones de la CNDH, una mujer identificada como Erika Martínez tomó la palabra para hacer un enérgico reclamo al mandatario.
Frente al cuadro de Francisco I. Madero, que aparece con el cabello pintado de morado, los labios rojos y flores en el saco, Erika López contó a las cámaras del noticiero En Punto que “estas flores, estos labios pintados los pintó mi hija, una niña que a los siete años fue abusada sexualmente”.
"Quiero decirle a ese presidente que cómo se indigna por este cuadro y ¿por qué no se indigna cuando abusaron de mi hija", continuó la mujer golpeando el cuadro del prócer de la Revolución Mexicana.
El evento en que se “subastaron” los cuadros de personajes como Miguel Hidalgo, José María Morelos y Pavón, Benito Juárez y Francisco I. Madero, surgió como respuesta a los comentarios del presidente en su conferencia mañanera, en la que dijo respetar todas las manifestaciones pero reprobar “el vandalismo” en las instalaciones de la CNDH.
"No estoy de acuerdo en la violencia, en el vandalismo (pues) el que afecta la imagen de Madero o no conoce la historia, lo hace de manera inconsciente o es un conservador. Es un proporfirista", señaló el jefe del Ejecutivo.
Al término del evento, funcionarios de la CNDH conminaron a activistas y familiares de víctimas a entregar las instalaciones del organismo y a realizar mesas de diálogo en las que se dará atención y apoyo a sus demandas.
