El presidente Andrés Manuel López Obrador rechazó que su esposa, la historiadora Beatriz Gutiérrez, haya tenido alguna injerencia en las cartas que envió al Rey de España, Felipe VI y al Papa Francisco, en las que les propone pedir perdón por los agravios en la Conquista.
“Acerca de Beatriz, que ella tiene mucha injerencia, sí es una mujer con criterio y desde luego nos comunicamos y platicamos, pero pues la responsabilidad es del Presidente”, aseguró en su conferencia de prensa matutina.
El titular del Ejecutivo incluso bromeó en que algún personaje lo llamó “mandilón”, lo que le provocó risa.
El mandatario dijo que con sus cartas se generó un debate que es bueno, porque se despertó un interés por la historia y salió a flote lo que estaba ahí en el subsuelo.
“Una corriente del pensamiento submarino muy racista, porque se negaba el racismo y salió por eso que bueno que se dio a conocer este asunto”, dijo.