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Villahermosa.— Andrés Manuel López Obrador cursó su último año de secundaria en la Escuela Federal No. 1 Jaime Torres Bodet, ubicada en la calle Francisco Javier Mina de esta ciudad, ahí conoció al maestro Rodolfo Lara Lagunas, quien dice sentirse orgulloso de haberle dado clases al próximo presidente de México.
El sentimiento es mutuo, pues durante una entrevista, cuando se encontraba en campaña, se le preguntó a López Obrador sobre alguna persona que haya marcado su vida y de inmediato señaló al profesor Rodolfo.
“Un maestro de secundaria, porque me daba la materia de Civismo. Todavía vive, ya está grande, lo respeto mucho, lo quiero mucho. Rodolfo Lara Lagunas nos daba Civismo y se salió del texto, él no sólo nos enseñaba lo que venía en el libro, nos contaba cosas; era líder estudiantil, había estado preso”, explicó el morenista.
Desde entonces han pasado más de 50 años y siguen siendo amigos, cuenta Lara Lagunas. El profesor de 76 años lo describe como un buen estudiante: “No creaba problemas, no era conflictivo, era tranquilo, no se metía entonces en la lucha estudiantil, no fue ni jefe de grupo”.
Con 15 años, a Andrés Manuel, dice, no le llamaba la actividad política para participar en ella, estaba en el momento de aprendizaje y de asimilar.
Lara Lagunas está listo para acudir este 1 de diciembre al Zócalo de la Ciudad de México para presenciar el primer discurso de su alumno como presidente constitucional.
Asegura que a través de un amigo, le han dejado una invitación para uno de los eventos de AMLO; sin embargo, todavía no sabe si es para la Cámara de Diputados o el mitin que realizará después del acto protocolario.
“Es una de las grandes satisfacciones que un presidente haya sido mi alumno, imagínate qué privilegio, estoy emocionado, voy a estar el primero [de diciembre] ahí en la plaza, como cualquier ciudadano celebrando este acontecimiento, sí voy”, precisa.
Rodolfo Lara Lagunas es doctorante en Pedagogía, cuenta con una maestría en Educación Cívica y Social. En 2013 fue designado secretario de Educación por el gobernador perredista Arturo Núñez, cargo al que renunció en julio de 2015.
También fue líder estudiantil del movimiento de 1968: “Como estuve en el movimiento del 68, me meten a la cárcel y luego me expulsan, entonces regreso 17 años después. Me fui a Tapachula, después estuve en Querétaro y Sinaloa, pasé a Campeche y finalmente regresé a Tabasco para los años 80”, época en la que se reencontró con su ex alumno.
Los siguientes pasos.
Durante su adolescencia en Villahermosa, López Obrador, junto a sus padres, Andrés López Ramón y Manuela Obrador González, y sus hermanos, vivieron en la casa marcada con el número 111 de la calle Pedro Fuentes, en el centro de la ciudad, inmueble que fue vendido a don Alonso Zurita Pérez.
“Aquí vivía, era a toda madre, era tranquilo, sabía lo que hacía; era a todo dar, era un buen muchacho”, así describe don Alonso a AMLO.
López Obrador cursó sus estudios medio superior en la preparatoria estatal, Manuel Sánchez Mármol, que en 1973 se convirtió en el plantel No. 1 del Colegio de Bachilleres.
Los años de preparatoria para Andrés Manuel fueron los de un joven común, estudiaba y luego apoyaba a sus padres en una tienda que tenían muy cerca del mercado de la ciudad; vendían telas y ropa, según cuentan los vecinos.
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