Un grupo especializado de la Procuraduría General de Justicia (PGJ) de la Ciudad de México, en coordinación con elementos de la Secretaría de Seguridad Ciudadana, el Heroico Cuerpo de Bomberos y Protección Civil, realizó trabajo de campo de búsqueda y rastreo en el Cerro de la Estrella, en las inmediaciones de la alcaldía Iztapalapa, para localizar el cuerpo de una mujer, el cual sus familiares aseguran podría estar en una fosa clandestina en ese lugar.
El operativo lo encabezó la Fiscalía Especializada en la Búsqueda, Localización e Investigación de Personas Desaparecidas, a través de su Coordinación de Búsqueda.
Previo a esta visita, se peinaron lugares de la zona boscosa de Tlalpan y Xochimilco; sin embargo, hasta el momento no se ha tenido suerte, pues no han encontrado los restos.
Según el expediente del caso, familiares de una mujer que desapareció en abril de 2018 solicitaron a la autoridad investigadora organizar el rastreo, pues cuentan con información de que la víctima pudiera estar en una suerte de fosa clandestina en las zonas referidas.
Al respecto, la procuraduría capitalina explicó que estas acciones son aplicadas en todos los casos de desaparición que tienen conocimiento.
En la Fiscalía Especializada en la Búsqueda, Localización e Investigación de Personas Desaparecidas existen expedientes y solicitudes de por lo menos 10 familias que buscan a sus seres queridos, los cuales, con base en la investigación, presuntamente fueron ejecutados por La Unión Tepito.
Aparentemente las personas reportadas ante la PGJ eran narcomenudistas rivales y esa agrupación criminal los levantó y ejecutó, para más tarde inhumarlos en lo que pudieran ser fosas clandestinas.
El pasado 12 de marzo, EL UNIVERSAL publicó que las autoridades locales y federales buscan en la zona boscosa de Tlalpan y Xochimilco las presuntas narcofosas, esto luego de que encontraran dos casas de seguridad de La Unión Tepito en el llamado barrio bravo, donde torturaban y asesinaban a sus rivales.
Varios de estos cuerpos fueron encontrados en las inmediaciones de las alcaldías Cuauhtémoc y Venustiano Carranza; sin embargo, de las 10 personas que todavía no encuentran sus familiares no se tiene una pista de su paradero. Un rastreo que hicieron a los teléfonos celulares de los capos de esa agrupación criminal, que ya fueron capturados, los ubicó en las inmediaciones de la zona boscosa de Tlalpan y Xochimilco.
Por lo que no descartan que en algún punto de esos lugares, en cementerios clandestinos, están enterrados los cuerpos. Aunque la autoridad investigadora admitió que se han realizado más búsquedas como la de ayer, hasta el momento no se ha encontrado un solo cadáver.