En el accidente en el que murieron la gobernadora de Puebla, Martha Érika Alonso y el senador, Rafael Moreno Valle, no hubo explosivos ajenos al propio combustible del helicóptero, determinaron peritos en materia de incendios y explosivos de la Secretaría de Marina que coadyuvan en las investigaciones del caso.
Así lo informó en conferencia de prensa Alfonso Durazo, secretario de Seguridad y Protección Ciudadana.
El Subsecretario de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes, Carlos Alfonso Morán Moguel, además explicó que ha sido recuperada la unidad de adquisición de datos de vuelo, misma que fue enviada a Canadá para ser analizada por peritos en la materia.
Agregó que el Consejo Nacional de Seguridad en el Transporte de los Estados Unidos no podrá coadyuvar al gobierno mexicano en la investigación iniciada por el siniestro, en el que además de los dos funcionarios federales perdieron la vida otras tres personas, debido al conflicto interno entre el Senado y la Presidencia de Donald Trump por la construcción del muro fronterizo.
En consecuencia, México solicitará a peritos canadienses y de la Unión Europea que se sumen a las indagatorias del caso, tomando en consideración que el fabricante del helicóptero Augusta 109 en el que murieron la gobernadora y el senador es de Canadá y el del motor es de Italia.
Además, las primeras investigaciones arrojaron que la aeronave cayó de cabeza, es decir, de forma invertida.
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