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El regidor panista y empresario ganadero del municipio de Santiago Maravatío, Guanajuato, Cornelio López Moreno, fue ejecutado en la comunidad Playas de Sotelo, del ayuntamiento de Silao, a unos seis kilómetros del Puerto Interior.
López Moreno se encontraba en condición de desaparecido desde el 19 de septiembre pasado. Es el tercer regidor guanajuatense asesinado en los últimos 40 días, dos son del PAN y uno de Morena; los dos anteriores pertenecían a los municipios de Apaseo el Alto y Comonfort.
El cuerpo del panista fue encontrado la tarde del 30 de octubre en un camino de terracería que comunica las comunidades de Playas de Sotelo y Loza de Barrera. Presentaba heridas producidas por arma de fuego y el tiro de gracia.
La Fiscalía General del Estado (FGE) informó que la víctima permaneció como no identificado hasta ayer, cuando el ayuntamiento de Santiago Maravatío, en los límites entre Guanajuato y Michoacán, confirmó su identidad: “Con profundo pesar ratificamos la sensible pérdida del regidor Cornelio López”.
La FGE informó que la Unidad Especializada en Investigación de Homicidios acudió al sitio y dio inicio a las indagatorias y se procedió a su identificación legal.
Cornelio López desapareció el 19 de septiembre, después de asistir al Informe de Gobierno del edil Fernando Rosas Cardoso y convivir con sus compañeros de Cabildo.
Los otros políticos asesinados son Francisco García Ramírez, rafagueado en Apaseo el Alto, el 24 de septiembre. Al siguiente día, mataron al regidor del PAN, José Luis Saucillo Méndez, en el municipio de Comonfort. A la fecha no hay detenidos por el homicidio de los tres políticos, ni la fiscalía ha revelado avances en las investigaciones.
En las redes sociales, la familia de Cornelio López compartió una fotografía de él y lamentó la pérdida que ha dejando tanto sufrimiento a sus hijos, padres y toda su familia.
“Tú jamás hiciste daño a nadie, al contrario, yo sé que todas les personas que te conocieron se llevaron una sonrisa con tus chistes, así eras tú, alegre, y por lo mismo no será fácil aceptar que ya no estás entre nosotros. Dios te dio alas y desde allá seguirás haciendo lo que más te gustaba, jaripeos”.
