Ciudad Hidalgo.— Un migrante hondureño murió y al menos ocho resultaron heridos durante un enfrentamiento con federales, tras cruzar por la fuerza la valla de Guatemala e intentar ingresar a territorio mexicano, informaron los bomberos voluntarios del país centroamericano.
El hondureño recibió el impacto de una bala de goma en la cabeza y falleció cuando era trasladado por bomberos guatemaltecos hacia un centro asistencial en el municipio de Ayutla, en el departamentosuroccidental de San Marcos.
De acuerdo con medios guatemaltecos, el hombre que falleció fue identificado como Henry Adalid Días Reyes, de 26 años de edad y originario de Tegucigalpa, Honduras.
Este enfrentamiento fue el tercero que se registró la tarde de ayer, luego de que los integrantes de la segunda Caravana Migrante se confrontaron con policías de Guatemala y lograron tirar la valla de la aduana de ese país; luego lograron llegar al límite con México, donde policías federales montaron un cerco para impedir el paso de los centroamericanos.
Los agentes de la Policía Federal (PF) intentaron replegar a los manifestantes con gas lacrimógeno y balas de goma, pero en respuesta los migrantes arrojaron piedras, cohetones e incluso armaron bombas molotov para enfrentar a los uniformados mexicanos.
Alrededor de las 16:00 horas, uno de los centroamericanos quedó herido en la cabeza y al caminar para recibir atención médica perdió la vida. Una hora más tarde, un helicóptero de la PF sobrevoló la zona fronteriza —incluso invadiendo territorio guatemalteco— y arrojó gas lacrimógeno a la multitud, mientras que un contingente de la Policía Nacional Civil y el ejército de Guatemala montaron un cinturón de seguridad en el otro extremo del puente. Hasta el cierre de esta edición, la situación se mantenía en tensa calma.
PF no portaba armas, dice Segob. El gobierno de México rechaza y condena el uso de la violencia física o xenófoba, que es la antítesis de nuestras instituciones y vida democrática, y refrenda que los migrantes sólo pueden ingresar al país documentando su estancia y respetando las leyes establecidas, afirmó el secretario de Gobernación, Alfonso Navarrete Prida.
En conferencia de prensa, el funcionario aseguró que en los hechos ocurridos el domingo en la frontera entre México y Guatemala, los policías mexicanos no portaban armas de fuego ni de plástico, mientras que algunos de los agresores llevaban armas de fuego y bombas molotov.
Navarrete Prida indicó que México ha compartido información con los gobiernos de Guatemala y Honduras para que los agresores sean detenidos y puestos a disposición de las autoridades correspondientes y reiteró que en México no se criminaliza la migración no documentada.
Por la fuerza.
Desde la mañana de ayer, cientos de migrantes protagonizaron diferentes enfrentamientos en la frontera de México con Guatemala. Al llegar a la aduana de este último país, decenas hondureños se enfrentaron con la policía guatemalteca y dejaron heridos a seis elementos que fueron atendidos en el lugar.
Tras romper el cerco de la Policía Nacional Civil, el grupo de migrantes se dirigió al puente internacional Rodolfo Robles —que sirve de división política entre ambos países—, donde exigieron que se les diera el paso libre. “Vamos para México”, gritaron los centroamericanos antes de llegar al límite con territorio nacional.
Sin embargo, un grupo de encapuchados fue el más rijoso y exigía que se abriera la reja para que ingresaran todos los integrantes de la caravana.
Con información de agencias
arq