El PAN presentó ante el Instituto Nacional Electoral (INE) una queja en contra del presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, por la presunta indebida utilización de recursos públicos y la realización de expresiones de carácter electoral al presentar el pasado martes, en su conferencia matutina, el documento de un supuesto Bloque Opositor Amplio (BOA).
Junto con la querella el PAN solicitó al INE ordenar medidas cautelares para que el Presidente y funcionarios del gobierno se abstengan de realizar expresiones relativas a ese asunto, ante la presunción de que se realizan con fines electorales, para posicionar al partido Morena y la imagen del presidente.
De acuerdo con el panismo, al presentar el escrito “Rescatemos a México" y el supuesto BOA, el presidente López Obrador violentó la Constitución y las leyes electorales que impide utilizar recursos públicos para realizar señalamientos y expresiones de carácter electoral.
El pasado martes, la Presidencia de la República acusó que el grupo denominado Bloque Opositor Amplio (BOA) tiene una presunta estrategia para debilitar a Morena y al presidente Andrés Manuel López Obrador de cara los comicios de 2021 y en 2022 con la revocación de mandato.
En conferencia de prensa, a solicitud del presidente López Obrador, el vocero Jesús Ramírez leyó un documento confidencial llamado Rescatemos a México impulsado por el BOA, cuyo objetivo —dijo— es desplazar a Morena en 2021 y revocar el mandato del presidente en 2022.
En respuesta, José Woldenberg, José Antonio Crespo, Mauricio Merino, Alberto Aziz Nassif y Alfonso Zárate, columnistas de EL UNIVERSAL, pidieron no dar crédito a la existencia del llamado Bloque Opositor Amplio (BOA) que, según el presidente Andrés Manuel López Obrador, busca desestabilizar a la 4T.
De fantasía, sainete y fake news calificaron el documento que presentó el Jefe del Ejecutivo federal la mañana del martes en su conferencia de prensa matutina, además de otro intento por polarizar a la sociedad entre los que apoyan a López Obrador y quienes están en su contra.
En la democracia, argumentaron, no hay blancos ni negros y no se puede estar de acuerdo con la generalización de que las personas van a aprobar todo lo que hace una administración o estar en contra de todas sus posturas.