La secretaria de Gobernación, Olga Sánchez Cordero, dijo que el incremento del consumo de la marihuana obliga a legislar en la regulación de la misma, que no es despenalizar ni legalizar.
Al participar en el foro ‘Hacia una política de regulación de la cannabis’ en el Senado, afirmó que es urgente reformar el uso y consumo de las drogas, porque la política prohibicionista que se ha seguido en los últimos años ha incrementado la violencia en el país y la criminalización de un sector de la población que la consume.
“Esta estrategia ha fallado en proteger la salud, la seguridad y el respeto de los derechos humanos de los consumidores, lejos de inhibir el problema se ha registrado un incremento de las organizaciones criminales derivada del aumento de consumo internacional y nacional del cannabis”.
Sánchez Cordero dijo que el mayor reto es equilibrar el enfoque de salud pública con los intereses derivados de su comercialización.
Aseveró que, de acuerdo con la Encuesta Nacional de consumo de drogas, alcohol, tabaco 2016-2017, reflejó un incremento del 10.3% del consumo global de las drogas, en particular el cannabis tuvo un alza del 6 al 8.6%, lo que representa a las personas que lo han probado una vez en su vida.
“El incremento en el uso del cannabis nos obliga a revisar un enfoque diferente, porque el objetivo no puede ser erradicar el consumo de una sustancia con tal prevalencia en la sociedad, por ello el tema del cannabis, desde la óptica de la salud pública, que establezca el derecho a la autodeterminación y a la salud del consumidor”, anotó.