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El Senado de la República avaló con 83 votos a favor, 37 en contra y cero abstenciones, el dictamen de idoneidad sobre la elección de la nueva ministra de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN).
Una vez avalado el dictamen, las aspirantes Loretta Ortiz, Yasmín Esquively Celia Maya, comparecerán ante el pleno por 20 minutos.
Posteriormente, los senadores emitirán su voto vía cédula, por lo que será secreto, una de las tres candidatas debe alcanzar la mayoría calificada (85 votos), de no lograrlo, habrá una segunda votación, si no se da, entonces la terna se regresa al Ejecutivo federal, para que mande una nueva.
En su exposición, el senador Gustavo Madero (PAN), dijo que la independencia del Poder Judicial es indispensable siempre, sobre todo, cuando existe una mega concentración del poder político en una persona, como lo es ahora, “esta independencia, la independencia del Poder Judicial no sólo es indispensable, sino de una grave trascendencia”.
Madero Muñoz indicó que el Senado tiene una grave responsabilidad sobre sus hombros. “Nos lo dicen en la calle, “ustedes tienen esa posibilidad de hacer un contrapeso”.
La senadora Claudia Anaya (PRI), indicó que el proceso de selección de ministras ha sido uno de los procesos más observados por la sociedad civil, y por ello, es que muchas organizaciones los han buscado como grupos parlamentarios o de manera individual, para hacernos ver ciertos requisitos que a consideración social, “no son efectivamente” los enmarcados en la Constitución, “porque hay que dejarlo en claro”, los requisitos que enmarca la Constitución sí los cumplen las aspirantes.
“Pero hay otros principios básicos que las organizaciones, ciudadanos y académicos, han pedido que revisemos a razón de ser un Poder el que elige los integrantes de otro, que por 15 años estará dictando sentencias en este país, y que es muy importante que velemos por personas que garanticen independencia, autonomía y le den fortaleza a otro Poder, a otro Poder autónomo e independiente”, expresó.
