Culiacán.— A 15 días de las hostilidades entre Los Chapitos y Los Mayos por el control de El Cártel de Sinaloa, el lunes una nueva fuerza de 100 efectivos de tropas especiales y paracaidistas llegaron al estado para reforzar su presencia operativa.
Este tercer contingente se suma a los 200 elementos de fuerzas especiales que ya tenían presencia en el estado y a los 600 militares que desplegó el sábado pasado el Ejército.
En este contexto, ayer se reportó el asesinato de cuatro hombres, tres de ellos en el medio rural de Culiacán y uno en el poblado las Cañas, del municipio de San Ignacio, así como la privación de la libertad de tres personas y dos más lesionadas a balazos, al eludir a grupos armados que intentaron levantarlos.
Sobre los asesinatos, se documentó que uno de ellos tuvo lugar cerca de una escuela primaria, en la comunidad del Melón, sindicatura de Quila, donde fue localizado el cuerpo de un hombre joven con impactos de bala.
Otro cuerpo, el de un hombre de unos 40 años que presentaba un impacto de bala, fue hallado en las cercanías del campo agrícola Florencia, ubicado en la sindicatura de Costa Rica.
Las autoridades médicas del IMSS, de la sindicatura de Costa Rica, reportaron la muerte de Alexis “N”, de 38 años, por heridas de bala, producidas en un ataque que sufrió junto con su esposa, Araceli “N”, cuando circulaban por la carretera México-Nogales.
La mujer, quien presentó lesiones en el cuerpo por golpes, narró que hombres armados los interceptaron en dicha vía y sin mediar palabra a ella la agredieron y a su esposo le dispararon.
En la zona norte del estado, cerca de la colonia Loma de Rodrigara, Carlos Alberto N”, de 23 años, fue auxiliado por la Cruz Roja, al resultar herido de bala tras eludir a civiles armados que pretendieron privarlo de su libertad.
Poco antes de este hecho, un caso similar tuvo lugar en la colonia Barrancos, en el extremo sur de la capital del estado, en donde Jesús Bladimir “N”, de 31 años, fue internado en una clínica particular con lesiones de arma de fuego.
Otros dos jóvenes que fueron privados de su libertad por civiles armados que atacaron una vivienda en la calle Campanillas de la colonia Laureles Pinos, en Culiacán, fueron localizados a salvo.