Siete hombres y una mujer fueron vinculados a proceso penal tras el homicidio del comandante de la Guardia Nacional (GN) y teniente de Infantería, Carlos Anastasio, y por la tentativa de homicidio en contra de ocho elementos de Seguridad, durante un enfrentamiento registrado la tarde del pasado 10 de agosto en la comunidad Loma de Zempoala, municipio de Yuriria, Guanajuato.
La Fiscalía General del Estado (FGE) informó que los ochos imputados también enfrentan cargos por los delitos de robo equiparado y posesión de armas de fuego, cartuchos y cargadores de uso exclusivo del Ejército y la Armada.
La FGE señaló que los individuos y la mujer fueron detenidos tras una persecución que inició en territorio del municipio de Valle de Santiago.
Los imputados fueron identificados como Juan Carlos "N" de 30 años, Ismael "N" de 22 años, Laureano "N" de 40 años, José Ramón "N", María Elena "N" de 24 años, Juan Jesús "N", Heliodoro "N" de 19 años y Miguel Ángel "N" de 40 años.
EL ENFRENTAMIENTO
La fiscalía describió que, el día de los hechos, los guardias realizaban labores de vigilancia y prevención en un tramo carretero que conduce de la comunidad de Cahuajeo dirección a la Angostura, cuando observaron que un vehículo Nissan Xtrail realizaba maniobras para alejarse de los policías.
En el automóvil los agresores realizaron disparos en contra de los elementos, quienes comenzaron la persecución de éstos hasta llegar a la comunidad Loma de Zempoala, donde los presuntos delincuentes se introdujeron en una “casa de seguridad”, llevando consigo chalecos balísticos y armas largas.
Al ser atacados a balazos desde el interior del inmueble, los efectivos de la Guardia Nacional y de corporaciones municipales y estatales repelieron la agresión.
En un intercambio de disparos, una mujer salió acompañada de un menor y gritó que habían niños y familias que “quieren salir”, por lo que el teniente Carlos Anastasio se acercó para protegerla y segundos después fue baleado.
“Eso esperaban los agresores, quienes volvieron a detonar las armas de fuego dejándolo gravemente lesionado”. El teniente falleció horas después al recibir atención médica en una institución hospitalaria -en el municipio de Jaral del Progreso-, describió la fiscalía ante el juez de la causa.
En la casa de la que salió la mujer con el menor, no había más mujeres ni niños, sólo hombres armados.
En la audiencia el Ministerio Público describió que después de más de 20 minutos de intercambio de disparos, los elementos policiales lograron introducirse al inmueble cubriéndose con los vehículos de los sicarios estacionados en el lugar, entre ellos un vehículo blindado, lo que obligó a la rendición y salida de los agresores de la "casa de seguridad".
Dentro de la propiedad se localizaron diversas armas de fuego, así como cartuchos y cargadores para de uso exclusivo del Ejército y Armada de México.