Más Información
La mayoría de los pacientes atendidos por la Crimal, han sido amputados derivado de complicaciones de la diabetes, seguido de las pérdidas por accidentes traumáticos y laborales, informó Eduardo Vázquez Vela Sánchez, médico y socio fundador de la I.A.P., establecida en la capital.
En entrevista para EL UNIVERSAL Querétaro, Vázquez Vela Sánchez, indicó que cada año, cerca de 120 pacientes son atendidos por el Crimal, la única I.A.P. en el estado dedicada a la rehabilitar personas con discapacidad que han sufrido la pérdida de algún miembro a causa de un accidente o enfermedad.
Crimal cuenta con 25 años de operación en la entidad, de acuerdo con el especialista, quien menciona que en este tiempo, también se han atendido a migrantes que han caído del tren —en su trayecto hacia Estados Unidos— y deben ser amputados.
Además de casos originados por accidentes laborales, como descargas eléctricas, así como mutilaciones por problemas congénitos u oncológicos.
“Hace 25 años no había más que una institución en México dependiente de la Secretaría de Salud, que atendía un número pequeño de pacientes, no había en ningún DIF un laboratorio de fabricación de prótesis.
“A raíz del terremoto de 1985, un grupo de norteamericanos empezó a venir a México y al término del programa, mi hermano que era protesista, se organizó con ellos y empezó el proyecto para cubrir una necesidad que hasta entonces, no había sido cubierta”, relata.
El instituto, ubicado en la colonia El Jacal de la capital del estado, atiende a personas de diferentes edades y condiciones socioeconómicas, según menciona Vázquez Vela Sánchez, al referir que a cada paciente realiza se le un estudio socioeconómico para determinar la cantidad de su aportación durante el tratamiento que incluye la fabricación de la prótesis, atención médica, sicológica y fisioterapéutica.
Alto costo por prótesis. Aunado al impacto psicológico de la mutilación, los pacientes deben cubrir, en medida de sus posibilidades, el costo de una prótesis, cuyo precio oscila entre 20 y 600 mil pesos, según el especialista.
“El problema es tremendo, muchos de los discapacitados están en su casa, los cuida alguien y lo económico es otro problema. No es nada más lo que deja de producir quien está amputado, sino que muchas veces requiere que alguien lo cuide y ese ya no genera ingresos para la familia”, refiere.
Según el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) en el 2010, 4 millones 527 mil 784 mexicanos reportaron tener una limitación en sus actividades y 58.3% dijo, tener problemas para caminar o moverse.
En el caso de Querétaro, 66 mil 963 personas, en el mismo año, se registraron con algún tipo de discapacidad y de éstas, 36 mil 39 mencionaron tener problemas para caminar.
Por su parte, Vázquez Vela Sánchez menciona que de acuerdo con cifras de la Academia Mexicana de Cirugía, en el país, cada día 75 personas sufren una amputación por diversas causas.
“Es un problema económico, social, médico y humano muy importante”, finalizó el especialista.