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Hace una semana que la esperanza regresó a la vida de Dafne McPherson Veloz, pues el Vigésimo Segundo Tribunal Colegiado del Estado de Querétaro tiene en análisis la resolución de un amparo con el que podría obtener su libertad, luego de casi dos años y medio de estar recluida en el penal de San Juan del Río, Querétaro, por el delito de homicidio calificado por un presunto aborto que tuvo en la tienda Liverpool donde trabajaba.
Fueron la serie de presuntas irregularidades denunciadas por los abogados de Dafne las que llamaron la atención de diversos sectores en todo el país, y además pusieron bajo la lupa la manera en que la entonces Procuraduría General de Justicia de Querétaro llevó el caso, al permitir que el fiscal encargado del asunto, Gustavo Dolores Acosta, utilizara prejuicios morales como argumentos e incluso insultara a Dafne al compararla con una perra durante una de las audiencias, así como una serie de situaciones inconsistentes que violaron los derechos fundamentales de esta mujer.
Dafne Mcpherson tiene 28 años y es mamá de una niña de 6 años de edad, pero desde que ingresó al penal no ha podido verla. Para Dafne los días han sido largos a partir de que fue detenida por autoridades ministeriales de Querétaro en mayo de 2015. La incertidumbre y la depresión la han acompañado en todo este tiempo, pero la esperanza de conseguir su libertad y reencontrarse con su hija y su familia es el motor que la mantiene firme en la lucha por obtener justicia.
“Para mí ha sido muy difícil estar aquí, y han sido muchos sentimientos en todo este tiempo, por lo que ha pasado. El día que me detuvieron estaba en una etapa de mi vida en la cual todavía no podía ni asimilar que había tenido un parto y que mi bebé se había muerto… después me trajeron a este lugar, pero lo que más me duele es que me hayan quitado de lado de mi hija”, relata para EL UNIVERSAL Querétaro.
En estos más de dos años, Dafne ha conocido emociones y sentimientos encontrados. Ha pasado de la incertidumbre al miedo y de la inseguridad a la esperanza, a ser fuerte, a sentir que no puede más pero nuevamente resistir con entereza y tener confianza. Desde afuera, sus padres y sus tíos son los únicos familiares que se han mantenido cercana a ella y son quienes han agotado sus recursos para encontrar quien pueda ayudarles a sacar a Tany (como ellos le dicen) de la cárcel.
Hablar con Dafne es hablar con una madre que lleva en ella el dolor de haber perdido a sus dos hijas, pero que fue castigada porque las autoridades consideraron que le faltó “instinto materno” para salvar a una de ellas.
Ella considera que lo peor de ese castigo ha sido no poder abrazar a su hija de seis años, ni poder ver cómo ha crecido en este tiempo; recibir sus cartas y sus dibujos pero no estar a su lado para disfrutar y sorprenderse con cada logro que alcanza. Esa cotidianidad de la vida de una madre con su hija es lo que más extraña y lo que más anhela desde su celda.
“Cuando entré (a la cárcel) tenía una depresión muy fuerte, he tenido crisis en estos dos años, pero siempre ha estado la motivación de ver a mi hija, y de que yo tengo que salir para sacarla adelante; eso es lo que no me deja caer por completo, pero sí han existido momentos, como cuando vimos perdido el juicio, en los que llegué a pensar que se había acabado mi vida porque no estaría más con mi hija… No ha habido un día fácil en estos dos años, pero la esperanza de estar con mi niña me ayuda a salir adelante y a no dejarme caer. Ella es mi principal motivación y por eso seguimos luchando”, explica.
Apoyo de ONG
La posibilidad de obtener un amparo que lograra la libertad de Dafne se abrió hasta que la familia se encontró con el abogado Aureliano Hernández Tinajero, quien estuvo presente en la audiencia donde el fiscal la insultó. Fue el tercer abogado que la familia tuvo para atender su caso y hasta entonces lograron claridad para actuar. Después, la familia logró contactar a las abogadas del Grupo de Acción por los Derechos Humanos y la Justicia, y en conjunto lograron presentar el amparo.
La organización social también inició una petición a través de la plataforma www.change.org con la cual han obtenido más de 51 mil firmas de ciudadanos que apoyan la libertad de Dafne y que han conocido de las irregularidades del caso, a través de las denuncias hechas por las activistas y los abogados.
Al hablar de este apoyo ciudadano, Dafne asegura que se siente agradecida con quienes, sin conocerla, han mostrado su ayuda, y por eso ella también espera que su caso no sea sólo una cifra más, sino que genere un precedente para que las autoridades judiciales cumplan cabalmente con los procesos y que las autoridades ministeriales investiguen conforme a la ley.
“En estos momentos ya tengo más esperanza porque a lado mío aparte de mi familia que eran los que creían en mí, he encontrado unas personas que son los abogados que confían en mí y están luchando por mi libertad. Ya no me da miedo… Sí me gustaría que no se dieran situaciones así, más que nada que el sistema judicial investigue más en los casos para que se castigue a quienes sí sean culpables”, señaló.
Ahora, después de que el pasado 19 de octubre el Vigésimo Segundo Tribunal Colegiado del Estado de Querétaro dio a conocer a la familia y abogados de Dafne que estudiaría a profundidad el caso para poder determinar si pueden darle un amparo, Dafne siente incertidumbre y ansiedad por conocer la decisión de los magistrados, reconoce que hay esperanza de poder alcanzar su libertad, aunque también existe la posibilidad de que sea negado y eso es algo que ella y su familia tiene muy presente, sin embargo es momento de arriesgar todo y no perder la fuerza, de seguir luchando, mantenerse firmes y llegar hasta el final.
“Ando en la incertidumbre porque puede ser mi libertad o que sigan en la misma opinión y no me dejen ir, y me quede encerrada imposibilitada para poder ver a mi bebé, pero ahorita ya hay más esperanza que antes… Estoy con ansiedad, siento ansiedad porque el tiempo no avanza, ya quiero saber qué pasa, eso de estar sin saber me inquieta porque lo que más quisiera es mi libertad y estar con mi hija y mis papás, que son quienes han hecho todo para poder ayudarme”, finalizó.
