Con un tradicional temazcal hecho de carrizos e instalado en el Centro de Desarrollo Artesanal Indígena (CEDAI), el temazcalero queretano, quien prefiere usar su nombre de tradición prehispánica Ce.Teckpactl (cuchillo de pedernal u obsidiana), busca rescatar las ceremonias ancestrales y evitar que sigan convirtiéndose en una moda.
“Me da pena ver que mis hermanos vendan nuestra patria, nuestras tradiciones, en lugar de defenderlas. La experiencia del temazcal es muy poderosa, no debería ni siquiera cobrarse, y últimamente vemos temazcales por todos lados”, comenta.
Con este temazcal también buscan aumentar la afluencia de visitantes al centro indígena, que en el último año ha padecido la crisis económica debido a la contingencia por Covid-19.
Ce. Teckpactl, originar io de Corregidora, aprendió rituales ancestrales desde que tenía 7 años; con orgullo cuenta que aprendió todo lo que sabe de su abuela Oliva Francés Arroyo, quien fue conocida entre la comunidad por practicar la medicina ancestral, por hacer “curas de espantos” y “limpias”.
Recuerda que durante su infancia, escuchaba los tambores de los concheros, y su abuela lo mandaba a cortar plantas que crecían en la pirámide de El Pueblito, cuando aún no era una zona protegida por el INAH.
“Yo escuchaba a los concheros con sus tambores, y mi abuelita me decía ‘corre a donde están ellos y trae todas las plantas que ‘encuentres’. Iba corriendo o en mi bicicleta a la pirámide de El Pueblito, cuando aún no estaba prohibido el paso, y subía toda la pirámide, extendía mis brazos y pedía permiso para llevarme algunas plantas, que después mi abuelita usaba como medicina”, cuenta.
Agrega que tras esta experiencia el camino para convertirse en un temazcalero o en misionero de temazcal, nivel en el que se encuentra, no se recorre de un día para otro.
“Yo represento un temazcal con varas de carrizo, muy humilde como dice la tradición ancestral. Un temazcal significa ‘casa de vapor’, no es un simple baño de vapor o un sauna, como muchos piensan, es un ritual, una terapia para el encuentro consigo mismo.
“En esto hay controversial, egocentrismo, participaciones deshonestas de muchas personas, me embarga que las comunidades estén vendiendo nuestra cultura, eso está pasando actualmente, es algo degradante que estén vendiendo el temazcal, cuando esto es un concepto mental, espiritual, es vender nuestra información ancestral y usarla como un negocio”, dice.
Señala que el temazcal del CEDAI se ha pensado como un proyecto a largo plazo, será una experiencia accesible para todas las personas pues no se cobrará una tarifa obligatoria, sino que cada quien, de acuerdo a sus posibilidades, apoyará con una colaboración voluntaria.
“Es lamentable que abusen con el costo del temazcal, hay una advertencia sobre eso y hay una maldición, porque los temazcales no se venden. Tengo 38 años de trayectoria y tardé 10 años en ser temazcalero.
“Pretendo tener este temazcal en el CDAI tanto como me lo permitan, ser autónomo y acercar esta experiencia a las personas, no voy a cobrar, nunca, se darán cooperaciones voluntarias antes de ingresar”, asevera.
Ce. Teckpactl comparte que en sus más de tres décadas de experiencia en técnicas ancestrales, siempre ha concluido sus trabajos con sonrisas y no con reclamos.
“Hay personas que han ido a otros temazcales y terminan asustadísimos porque tuvieron claustrofobia, el vapor estaba muy caliente, no los dejaban salir, eso no se hace, así no es la práctica ancestral de un temazcal, eso es lo que yo quiero ofrecer, que conozcan de nuestras raíces, el verdadero significado de esta técnica ancestral que es también terapéutica y que incluso debería formar parte de los sistemas de salud de nuestro país”, comenta.
El hombre detalla que fue invitado a crear su temazcal en el CEDAI por las propias autoridades estatales, aunque ya había presentado este proyecto y documentación necesaria desde hace un año, por lo que considera que incluso es simbólico que el temazcal comience a funcionar en estos días, después de haber pasado una temporada complicada debido a la contingencia sanitaria por el Covid-19.