Las flores de cempasúchil brillan a todo lo que da en tonos naranjas y amarillos entre los pasillos del Mercado de las Flores. En Día de Muertos la mayoría de los locatarios aún tienen cientos de macetas con flores de temporada; esta es la última oportunidad de vender el producto a buen precio, de lo contrario terminarán vendiendo las flores a la mitad de su costo original.
En los pasillos del mercado hay clientes, pero muy pocos, no se compara con la multitud en las inmediaciones del panteón municipal de la colonia Cimatario, donde decenas de ambulantes también venden cempasúchil, nube y cordón de obispo, pero a precios muy distintos, generalmente son más altos que en el propio mercado, pero los clientes no lo saben.
Alfredo Gutiérrez, de 56 años, acude como cada año al camposanto para adornar la tumba de su madre, tiene poco tiempo para realizar este ritual familiar, pues también debe atender a sus hijos que lo esperan en casa. Para él, lo más cómodo es comprar flores por ramillete de las que venden afuera del panteón, aunque reconoce que son más caras.
“Por las prisas, compré 50 pesos de flor de cempasúchil afuera del panteón y me vendieron un ramo muy pequeño, incluso con varias flores ya marchitas. Hace un momento me di una vuelta al Mercado de las Flores, que está aquí cerca, y por la misma cantidad compré tres macetas de flor de cempasúchil”, comenta.
Al interior del mercado, Claudia atiende a los clientes que llegan a su local y preguntan precios de las flores, casi todos compran alguna maceta; sin embargo, las ventas no se comparan con las de los ambulantes.
Además, hay otro factor que los locatarios tienen en contra, en esta ocasión cerraron varias vialidades aledañas al mercado y, al no haber tránsito de vehículos por la zona, el número de clientes también disminuye.
“En el mercado siempre tenemos precios más bajos que afuera y nuestras flores son de mejor calidad. Los comerciantes ambulantes son el tema de cada año, pero además este año nos cerraron una de las calles junto al mercado y los carros no entran directamente aquí. Eso ha retrasado la venta un poco, esperemos que no se nos quede la mercancía”.
Claudia se preparó para la celebración del Día de Muertos desde hace varias semanas, ella surte su local en el mercado con flores de temporada desde mediados de septiembre, pero después del 2 de noviembre lo que no se venda será producto desperdiciado.
“Yo siempre traigo flor de cempasúchil desde septiembre, son pocos, pero sí hay clientes que comienzan a comprar la flor desde esas fechas, esto es mucho de ganarle tiempo a la fecha porque, si no, se nos queda el producto, como ha pasado otros años, que las ventas bajan mucho... esperemos que este año no sea igual. Nosotros traemos la flor desde el estado de Morelos”.
Tener siempre flores de temporada es una de las principales fortalezas de este Mercado de las Flores. Por ejemplo, aunque apenas comienza el mes de noviembre, ya se ve en algunos locales las tradicionales flores de nochebuena, que se vende principalmente en fechas decembrinas.
Al contrario de Claudia, algunos locatarios del mercado prefieren no vender flor de temporada y concentrarse en otros tipos de flores, plantas, macetas y tipos de tierra; ese es el caso de Raúl, quien decide no arriesgar su capital ni correr el riesgo de traer mercancía que no se acabará.
“Yo vendo muchas variedades de plantas y flores, pero ya no vendo flor de temporada para Navidad o Día de Muertos, son periodos de tiempo muy cortos y el sacrificio y la inversión es mucha, nos arriesgamos a traer flores que no vamos a vender, porque sí ha pasado, que traemos mucho producto y luego nos quedamos con casi todo. Aquí en el mercado hay lugar para todos, ya cada comerciante decide lo que quiere vender”, considera Raúl.
Aunque Querétaro no es uno de los principales productores de plantas y flores en el país, su Mercado de las Flores sí es uno de los más grandes de México.
Con 10 mil metros de instalaciones, el mercado ofrece sin número de variedades de plantas, flores, macetas y tipos de tierra, convirtiéndose así en un rinconcito todavía desconocido para muchos queretanos y turistas.
Ubicado en Luis M. Vega en la colonia Cimatario, junto al panteón municipal, el Mercado de las Flores es un lugar vivo desde las ocho de la mañana, hora en que los primeros comerciantes abren sus locales.