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Virginia Romero Cruz observa los restos quemados de su miniván color blanco que sufrió vandalismo, luego de que alguien prendiera fuego a unas ramas de un árbol que la CFE podó y que la delegación municipal Villa Cayetano Rubio no terminó de recoger, el jueves pasado.
Sin seguro, la camioneta de Virgina es pérdida total, lo que trata de tomar con calma, aunque le gustaría ser indemnizada por las autoridades.
Virginia se asoma al interior de su camioneta, que tenía desde hacía cinco años. “Nos salió muy buena. Nunca nos dejó tirados”, dice con cierta nostalgia mientras ve los restos de la minivan, y agrega que durante la madrugada del viernes alguien se acercó a la unidad y sustrajo el rin de una llanta.
Recuerda que la única ocasión en los que tuvo una falla, fue cuando en un viaje el conductor se quedó dormido y salió del camino, lo que causó una avería en la parte baja de la unidad, teniendo que ser trasladada en grúa de San Juan del Río a la ciudad de Querétaro.
El incendio ocurrió en avenida Del río esquina calle Del deporte, en el barrio de Hércules, el jueves pasado, en un momento entre la noche y la madrugada.
Las personas pasan y observan con curiosidad el vehículo y los árboles quemados. Las ramas secas por el calor comienzan a mostrar hojas amarillas, mientras que en el piso las ramas carbonizadas dejan evidencia de lo sucedido.
“Un maldoso pasó y echó un cigarro o un cerillo a la hierba [ramas]. Esa hierba la vino a podar la Comisión Federal de Electricidad [CFE] hace dos semanas. Como que ellos les avisan a los de la delegación. Se la fueron llevando por partes, como que no les cabía. Se las llevaron una vez, se la llevaron otra vez, y ese día que fue el incendio, en la tarde, como a las tres vinieron a recoger”, dice Virginia.
Narra que ese día tuvo un compromiso en la tarde y no vio si fueron de la delegación, aunque tienen un documento donde consta que sí fueron a recoger las ramas podadas y que al siguiente día acudirían a terminar de llevárselas.
“No sabemos quién fue [el responsable del incendio]. Del otro lado hay una cámara, pero no alcanza a ver hasta acá, donde está la camioneta. Hay otras cámaras, pero en la otra esquina y no pueden ver.
Yo ya fui a poner una denuncia [en la Fiscalía del estado]. Dicen que van a venir a investigar, pero no han venido”, subraya, al tiempo que precisa que la miniván no estaba asegurada.
Enfatiza que a las autoridades municipales les pidió una ayuda por la pérdida de su vehículo, pero confiesa que no cree que la reciba.
Indica que en el barrio, de un tiempo a la fecha, hay gente extraña, que pasan en la madrugada, se escucha a los perros ladrarles y los ven durante el día en las inmediaciones del río Querétaro. Señala que incluso, en algunas ocasiones, los policías municipales llegan a detenerlos, pero no puede responsabilizar a las personas en situación de calle que deambulan en la zona de lo ocurrido.
Virginia recuerda que hace poco vio a un hombre cargando un cartón, el cual arrojó bajo un puente del río.
Agrega que apenas el viernes durante la madrugada, un día después del incendio de su camioneta, un hombre ya había sustraído un rin de llanta del interior de dicha unidad.
Recuerda también que hace tiempo en la zona deambulaba una persona que se mostraba agresiva con los vecinos, llegando a tan grado que arrojaba piedras a las personas mientras pasaban.