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Luego de acudir a un bautizo, Jorge Alejandro Galindo empezó a tener síntomas de Covid-19; en un principio su familia no creía que fuera el virus, pero comenzó a tener temperatura y dolores de cabeza. Al practicarle la prueba, el joven de 29 años con síndrome de Down salió positivo y así comenzó una difícil etapa, relata Diana Galindo, su hermana, para EL UNIVERSAL.
“Amigos, mi hermano está en terapia intensiva por Covid. Ayúdenme para que el @ClubAmerica y @AmericaFemenil vea esto y me manden un video echándole porras para que se ponga feliz”, escribió Diana en su cuenta de Twitter, mensaje acompañado de un video que se hizo viral, con más de 200 mil vistas de internautas.
Alex, como le dicen de cariño, quien es fanático del Club América, estuvo una semana en aislamiento en su cuarto tras dar positivo a Covid y lo que más le frustraba, a decir de su hermana, es el hecho de que la comida no tuviera sabor, siendo que es lo que más le gusta.
“Alex empezó con problemas de saturación, se empezó a marear. Un día, cuando le subieron el desayuno, yo pasé por fuera de su cuarto y lo vi recargado en una mesita y me dijo que se sentía muy mal. Entré y lo agarré y se desvaneció”, relata Diana.
El escenario se tornó oscuro, pues al llevarlo al Hospital General de Querétaro, les dijeron que tenía tres cuartas partes de los pulmones invadidas por Covid; estaba grave y lo tenían que internar en el nosocomio.
Al estar en aislamiento, la familia del joven no se percató que él ya no acudía al baño, en el hospital les dijeron que ya tenía una falla renal.
Al contar con seguro de gastos médicos, la familia tuvo la opción de llevarlo a un hospital privado durante dos semanas en terapia intensiva.
Para la madre de Alex, la señora Gabriela García, fueron momentos inolvidables y de mucha angustia, pues no sabían qué iba a pasar con la salud del segundo de sus cuatro hijos.
“Cuando él me empezó a decir ‘¿mamá a qué sabe la comida?’, fue cuando le hicimos la prueba. Lo cuidamos muchísimo en casa, pero de la noche a la mañana fueron días muy tristes y muy difíciles. En el hospital nos dieron 72 horas para saber si sí la iba a librar o no”.
Cuando Alex vio que algunos jugadores del América le enviaban mensajes “él hasta intentaba incorporarse porque algunos días estuvo casi inconsciente. No podía creer los mensajes que estaba escuchando. Él me dice, ‘mamá un águila nunca se rinde’”, relata su mamá.
Fue mejorando poco a poco al pasar los días y ahora, al teléfono, la voz de Alex se escucha con mucho ánimo. “Aquí habla el conductor número uno de la televisión, ¿cómo están?”, son sus primeras palabras en la llamada. Momentos después cuenta que le gusta cocinar y que es muy fan del fútbol. “Fielmente al América desde que tenía 16 o 17 años”, asegura.
Hace tres semanas libró el Covid y ahora se encuentra en terapias para la recuperación de sus pulmones y continúa usando un tanque de oxígeno las 24 horas del día. “Me siento como mango. Bien entero. Fuera de peligro”, dice Alex.
“Fue una experiencia horrible. Sentimos el peligro de perder a nuestro hermano. Teníamos mucho miedo de cómo se sentiría en el hospital. Alex, al ser una persona con síndrome de Down, a veces no llega a entender las cosas, a veces es muy sentimental y temíamos ansiedad al no entender por qué estaba ahí y por qué tenía que estar solo”, dice Diana.
Alex no puede estar desconectado del oxígeno, pues puede llegar a saturar a niveles de 80 a 82 y sus pulmones aún no están desinflamados.
El proceso de recuperación de sus pulmones será tardado; Diana comenta que podría ser de hasta dos meses y que probablemente después de las terapias deba tomar otros tipos de activación física.
Diana quería sacarle una sonrisa a su hermano y se le ocurrió publicar en sus redes sociales un video en el que pedía le animaran a su hermano.
“Muchísimas me ayudaron a etiquetar a Club América y a los diversos jugadores y los jugadores me empezaron a escribir y me empezaron a contactarme y me contactó la jugadora Mónica Rodríguez. También me contactó Édgar, el encargado de marketing de Club América femenil y pues fue un caso que fueron siguiendo de cerca”.
“Cuando me contactó el encargado de mercadotecnia de las jugadoras del América, él se llama Édgar, me dijo que estaban interesados en regalarle a Alex una playera y tal vez invitarlo a algún partido.
“Me dijo que iban a venir el día 30 de julio las chicas del América a jugar. Me dijo a qué hora iban a llegar, a qué hotel y nos quedamos de ver como a las 6:00 de la tarde”.
Para Alex todo fue una sorpresa. Era la primera vez que salía desde que abandonó el hospital. “Lo llevamos al hotel y entonces todas las jugadoras que estaban entrenando como en la parte de atrás del hotel llegaron por un pasillo todas juntas con una caja súper bonita autografiada”, recuerda.
El paquete “contenía la playera y también otro par de artículos (playeras enviadas por los jugadores Francisco Jiménez y Mauro Lainez) ahí para Álex y se la entregó Renata Masciarelli -también jugadora del América- y le dijo ‘hemos estado siguiendo tu caso muy de cerca, estamos muy contentas de que estés bien y tenemos un regalo’ y le dieron la playera y Álex, pues súper feliz”.
Aunque fue muy rápido, debido a que las jugadoras tenían su hora de cenar y su horario apretado, se tomaron una foto con él “y le dieron un abrazo. Nos pidieron una entrevista sobre cómo se sentía Alex. Fueron muy lindas y nos dijeron que cualquier cosa que necesitáramos, que les habláramos a ver si nos mandaban cosas de la América”, relata Diana Galindo.
Álex no pudo ir al partido porque se hizo a puerta cerrada, pero disfrutó mucho de la atención de las jugadoras y el club.
Aunque en su casa el único pambolero es Alex, la familia se mostró muy contenta agradecida por las muestras de apoyo incluso de personas de otros equipos de futbol, quienes le mandaron sus buenos deseos y esto logró una notable alegría en el joven.