Juan Carlos Cervantes observa la pirámide de El Pueblito desde la calle Salvador Sánchez, una vialidad empinada y que de acuerdo al hombre hace mucho habían pedido que hicieran rampas para los adultos mayores, como su padre, quien ya no alcanzó a disfrutar de la obra, pues murió hace poco más de un año. El andador ahora luce otra cara, más amigable para los vecinos y para quienes quieran tener otra perspectiva del El Pueblito y su pirámide.
Desde la calle Salvador Sánchez, Juan Carlos, de profesión chef, explica que la vía forma parte de la conocida Ruta de la Adoración.
El hombre está afuera de su casa, que luce en la fachada una pintura de las hechas por jóvenes del Instituto Municipal de la Juventud y Nueve Arte Urbano. No son las únicas vivienda intervenidas con pinturas, muchas otras de la misma calle lo están, dando un aspecto vistoso al andador.
Las escaleras están iluminadas con tiras de luz led, con las que resalta la decoración con cerámica que se hizo a las mismas. Esta iluminación es esencial, pues no hay postes de alumbrado público como tal. Además de estas luces, las únicas luminarias son las ubicadas en los árboles que están a la mitad del andador.
“Nosotros habíamos pedido unas rampas para las personas mayores de edad que estaban. Estaban, porque ya falleció mi santo padre, y era un problema para bajarlos. Y bueno, ya las hicieron, arreglaron la calle.
“Mi papá vivía aquí. A mi mamá no la tengo porque está con una de mis hermanas por el momento, porque ya es de una edad avanzada. Mi papá tiene un año y un mes de que falleció. Casi cuando empezaron esto”, indica.
Para pintar las fachadas de sus casas, precisa, les pidieron autorización. No les dijeron exactamente lo que iban a hacer. La casa de Juan Carlos tiene un mural con un nopal, muy similar al que decora el frente de su casa, en un pequeño jardín que él mismo tiene.
“A mí no me dijeron qué tipo de fachada quería o qué dibujo quería. Cuando llegué ya estaba trazada, pero pensé que iban a hacer otro tipo de mural, pero me imagino que se guiaron por el tipo de jardín que tengo”, abunda.
Agrega que a algunos de sus vecinos les preguntaron qué querían en sus fachadas. Siempre les pidieron permiso. Entre las fachadas con murales hay una casa pintada de blanco. Al parecer, dice Juan Carlos, querían hacer la continuidad del mural de la casa contigua, pero en ella querían uno diferente.
Juan Carlos dice que la intervención del andador quedó muy bien. En la noche, con la iluminación se ve vistosa, dice.
Un gato se acerca a Juan Carlos. Dice que es suyo y le hace compañía. Más arriba en las escaleras tres perros observan al felino restregarse en la pierna de su dueño. No hacen nada por perseguirlo. Viven en armonía.
Juan dice que su padre compró la casa en 1986. Recuerda que el andador era de pura grava y tierra. Hace 25 años pusieron jardineras y los escalones. Hace un año comenzaron la nueva intervención para embellecer la calle.
“Antes subir era un problema porque era pura tierra, puro granillo. Estaba muy feo. También a la pirámide la arreglaron. La entrada era como de caracol, se podía uno subir hasta el cerrito. Desde aquí la pirámide se ve muy bonita”, destaca.
En el andador hay alrededor de 10 viviendas, de las cuales nueve están ocupadas. En la ubicada en lo alto hay un mural que hace homenaje a la Virgen del Pueblito. Esa vivienda está en remodelación al interior y los trabajadores tratan de no alterar el mural que decora la fachada.
De acuerdo al municipio de Corregidora, el objetivo de intervenir en el andador fue con el objetivo de “rescatar espacios y rehabilitarlos para generar un entorno urbano agradable y que genere seguridad, se realizó el programa Murales con Tradición, a través del que se facilitó la expresión artística para que se plasmaran las tradiciones de Corregidora”.
Explica que parte del proyecto consistió en la creación de la Calzada de los Ancestros en la calle Salvador Sánchez Bárcenas, de la colonia Emiliano Zapata, que tiene como objetivo honrar a los antepasados a través del arte.
Añade que esta colonia es de las primeras que se fundaron en Corregidora, y que con el tiempo comenzó a lucir abandonada, por lo que se decidió intevenirla para crear un espacio más agradable para los vecinos y visitantes.
De acuerdo a datos del mismo municipio “se intervinieron 2 mil 600 metros cuadrados con 14 murales sobre la calle Salvador Sánchez Bárcenas, tres macromurales en bajopuentes del municipio, intervención en la escalinata del andador Sánchez Bárcenas y en el panteón municipal, el preescolar Ana María Berlanga y la Expo Grafiti en la deportiva de Zapata”.
Adicionalmente se colocó iluminación de ornato en la escalinata de la colonia Emiliano Zapata con una inversión de 914 mil 199 pesos, brindando mayor seguridad para los vecinos que transitan por la zona, y al mismo tiempo se busca posicionarla como un atractivo para quienes visitan Corregidora”.
Antes de regresar a sus actividades Juan Carlos conversa con dos hombres que revisan el funcionamiento de las luces del andador. “Déjenlas, para que sea vea bonito”, les dice, mientras los observa subir lentamente. “Es la hora de más calor”, puntualiza.