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Yuvisela Hipólito y Josefina López son dos indígenas amealcenses de Santiago Mexquititlán, quienes junto a otras 10 artesanas de su misma comunidad, y desde hace nueve años, sostienen el taller “Mujeres bordadoras”, en el que además de dar vida a la muñeca de Amealco, confeccionan diferentes textiles tradicionales.
Durante el XVII Encuentro de las Culturas Populares y los Pueblos Indígenas en Querétaro, ambas impartieron de manera gratuita dos talleres de elaboración de muñecas otomíes y de telar de cintura, con el objetivo de mostrar al público el trabajo que conlleva la elaboración de sus artesanías.
Sin descuidar a sus aprendices, quienes con dificultad bordaron los ojos y trenzaron los cabellos negros de sus muñecas, Yuvisela platica que hace un año fue que decidió compartir su conocimiento con la gente, para aminorar la tan arraigada y mala costumbre de malbaratar el trabajo artesanal.
“Empecé con mis primeros talleres con el objetivo de sensibilizar a las personas para que no regateen más. Les traigo el cuerpecito ya armado, así como los vestidos para que en dos horas y media, se dediquen únicamente a bordar los ojitos y a colocar el cabello. Este mismo curso lo hemos llevado a primarias y secundarias de la entidad a través de USEBEQ, incluso nos han invitado a la Universidad Autónoma de Querétaro a impartirlo”, comparte la artesana, quien a los 13 años aprendió este oficio que ha permanecido en su familia desde hace tres generaciones.
“Los otomíes siempre hemos sido comerciantes y hemos migrado a otras ciudades del país para vender. Mi abuelita cuenta que esta muñeca nació en la Ciudad de México, en uno de esos tantos viajes, en el que una señora, para que dejaran de vender dulces en la calle, les ayudó a elaborar una muñequita —la primerita—, que después los artesanos jalaron al municipio de Amealco, donde desde hace 70 u 80 años se elabora”, recordó Hipólito, quien aseguró que por falta de espacio en el mercado, muchos artesanos, incluyendo su mamá, prefirieron dejar de hacerla un tiempo y dedicarse a otras cosas.
“En el año 2000 fue cuando la Comisión Nacional para el Desarrollo de los Pueblos Indígenas se interesó en esta artesanía e invitó a la gente a varias capacitaciones, porque se estaba perdiendo”, comenta Yuvisela, quien junto a su mamá retomó esta labor.
Para hacer una muñeca completa de 18 centímetros —cuyo precio es de 65 pesos—, tardan dos horas y media, ya que implica desde diseñar y crear los moldes, hasta cortar los vestidos, rellenar, bordar los detalles, pegar y trenzar el cabello. En el taller, las labores para la confección de cerca de 20 muñecas al día se divide entre varias artesanas que han creado un sistema de producción, mediante el cual cada una realiza una tarea específica.
“Cada quien elabora una parte, y si no pueden estar en el taller, se lo llevan a su casa para continuar con el trabajo. De otra manera, si cada quien hiciera una, nunca terminaría, ya que además de esta labor, hay que atender a los hijos, a los maridos, la casa o la ropa, por eso nos repartimos las actividades: unas rellenan las manitas o las patitas, mientras otras hacen cortes de vestidos, les ponen encaje a las falditas o unen la manga y la falda. Lo que pocos saben es que hay bastantes manos en una sola muñeca”, asevera la artesana, e informa que con este trabajo, cada una percibe de 800 a mil pesos cada 12 o 15 días, cuando se trata de un buen mes.
“A pesar de que nos ayudaron a rescatar la artesanía no teníamos puntos de venta, entonces empezamos a salir a las ciudades a vender, de ida y de regreso, y en la calle, donde generalmente nadie quería pagar el precio. Pero en los últimos cinco años han subido bastante las ventas”, asegura la joven de 24 años, quien atribuye el cambio principalmente a la existencia de eventos artesanales, como el Festival Nacional de Muñecas Artesanales, a celebrarse del 16 al 19 de noviembre en Amealco, donde su comunidad y artesanos de otros estados pueden vender sus productos y generar enlaces comerciales para promover sus mercancías en México y otros países.
En cuanto a la Declaratoria de la muñeca artesanal de Amealco de Bonfil como Patrimonio Cultural del Estado de Querétaro, promulgada el pasado 15 de agosto, Yuvisela asegura que aunque ha impactado en el reconocimiento de esta figura tradicional, no ha sido igual con el trabajo de los artesanos, quienes aún se ven obligados a vender sus productos en las urbes, con el riesgo de ser despojados por los inspectores.
“A veces nos ignoran, nos dicen que somos ‘Marías que no saben hablar bien el español’. Nos critican porque no tenemos un título que demuestre que sabemos hacer nuestro trabajo, por eso estamos aquí, dando estos talleres para que nos reconozcan”, dice Josefina, quien a la par de su hija, explicó a los curiosos la elaboración del quexquémitl, prenda tejida que algunas mujeres de su comunidad siguen luciendo sobre sus torsos y cuya confección les lleva hasta un mes, y “veinte días cuando nos urge mucho”, asevera.
“Además de la lengua hñähñu, el traje típico de Santiago Mexquititlán se está perdiendo”, agrega Yuvisela, y explica que esa es la razón por la que junto con otras artesanas del taller —en su mayoría amas de casa y madres solteras—, se han concentrado en rescatar el traje típico de la cultura otomí, a través de sus muñecas.
“Para mí es barato, nuestro trabajo no lo estamos cobrando, lo que se cobra es más que nada el material”, dice López, quien solo una o dos veces al año, “cuando nos va bien”, logra convencer a algún cliente de adquirir este textil, pues el precio de esta artesanía asciende a los tres mil pesos.
“No gano ni 30 pesos al día, a lo mucho 18 pesos, cuando me dedico de lleno para hacerlos. Muy poca gente considera los segundos y las horas que nos lleva. La verdad es que he regalado bastante mi trabajo, aún cuando tengo que gastar no sólo en comida, sino en camiones para irme a surtir a Toluca o Coroneo, donde compramos el material para elaborarlos”, lamenta.
Además de recibir cursos para profesionalizarse, las artesanas se han capacitado en ventas, con el objetivo de abrirse brecha en el mercado. Aunque ya han intentado acercarse a las grandes tiendas, Josefina afirma que necesitan de la asesoría de un contador; profesión en la que Yuvisela ha querido formase para complementar las labores del taller.
Entre las estrategias implementadas por las “Mujeres bordadoras”, se encuentra la innovación. Para las pasada celebración del Día de Muertos crearon y popularizaron la muñeca Catrina y próximamente estarán lanzando el especial navideño.
Fin de semana con las culturas populares y los pueblos indígenas
El XVII Encuentro de las culturas populares y los pueblos indígenas continúa dos fines de semana más en el Centro de las Artes de Santa Rosa de Viterbo. De este 9 al 11 de noviembre el programa está dirigido a la cocina tradicional e indígena, y para que no te pierdas ningún detalle, te lo compartimos:
Del 9 al 11 de noviembre: De 12:00 a 17:00 horas será el encuentro de cocineras tradicionales de los municipios: Ezequiel Montes, Cadereyta, Tolimán y Amealco, que participarán con diversos productos gastronómicos.
De 10:00 a 20:00 horas se expondrá la muestra fotográfica “Sabores de la Huasteca”, además de la Feria de las artesanías tradicionales e indígenas, que contará con muestra, exhibición de procesos de elaboración, conferencias y talleres, como el de tortilla de sello.
Viernes 9
14:00 horas. Trío “Los Microsónicos”, de San Luis Potosí. 15:00 horas. Coro de los niños Thuju Ne Njahya, de Tolimán.
16:00 horas. Presentación del libro “Sabores de la Huasteca”, además de degustación tradicional.
17:00 horas. Trío “Energía Huasteca”, de Arroyo Seco.
18:30 horas. Guillermo Velázquez y los Leones de la Sierra de Xichú.
Sábado 10
15:00 horas. Danza Agrícola de San Francisco, de Landa de Matamoros.
16:00 horas. Conservatorio “La importancia de la preservación de los maíces criollos”
17:00 horas. Martín Vega Suárez “El tigre de la Sierra”, de Jalpan de Serra.
18:30 horas. Perfecto López y su tradición Serrana, de Valle Verde, Tancoyal y Jalpan de Serra.
Domingo 11
14:00 horas. Conferencia “Programa de formación de niños y jóvenes huapangueros de la huasteca queretana”. Participación del Trío “Legión huapanguera”, de Agua Zarca y Landa de Matamoros.
15:00 horas. Trío “Las flores de las huastecas”, de San Joaquín.
16:00 horas. Mesa de Cocineras tradicionales de Querétaro.
17:00 horas. Trío “Amanecer huasteco”.
Todos estos eventos se celebrarán en el Foro al aire libre del CEART.
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