La indignación por el envenenamiento de los perros rescatistas Athos y Tango, continúa presente no sólo en las redes sociales de todo el país, sino que también ha ocupado calles y plazas públicas en Querétaro.
Y el movimiento social aún no para, pues los cuerpos de emergencia ABC K-9, Cruz Roja Mexicana, Protección Civil y distintos cuerpos de Bomberos, darán el último adiós a los canes rescatistas, este viernes.
Para despedirlos como héroes nacionales, planean una caravana de vehículos de emergencia que recorrerá las principales vialidades de la ciudad para culminar en la bandera monumental, donde rendirán un homenaje a los perros de trabajo que hace unos días murieron por ingerir alimentos con sustancias tóxicas.
A esta caravana se unirá también un grupo de ciclistas de la agrupación Saca la Bici, presidida por Agustín Osornio, quien explica el interés de esta comunidad por estar presente en el homenaje, pues no solo han trabajado de la mano con distintos cuerpos de emergencia, sino que también consideran a los perros de cualquier raza y condición, como excelentes compañeros de ciclismo y de cualquier otro deporte.
“Es algo simbólico, lo que nosotros queremos es mostrar nuestra empatía, acompañar a los cuerpos de emergencia porque ellos nos han apoyado mucho en nuestras actividades, muchos ciclistas también forman parte de estas corporaciones. Además, la comunidad ciclista de Querétaro es muy empática con las causas de los animales, muchísimos ciclistas se acompañan de sus perros, sabemos que los canes son muy importantes no sólo en actividades deportivas, sino en cada familia, en cada hogar.
“Nos solidarizamos con la pérdida de estos compañeros de trabajo, esperamos que llegue a los responsables y que esto sea un precedente, la forma en que tratamos a los animales debe cambiar para bien, y ese cambio debe ocurrir ya”, comentó.
Advierte que la convocatoria para acompañar a los vehículos de emergencia no es abierta, por lo que espera que apenas unos 20 ciclistas se unan al movimiento; insiste en que es una acción simbólica y en representación de todos la comunidad ciclista del estado.
La caravana de vehículos de emergencia partirá desde la famosa tienda comercial ubicada en Prol. Av. Zaragoza a las 8:30 horas, para llegar a la zona donde se encuentra el Asta Bandera Monumental de Querétaro.
El acto público con el que se dará el último adiós a Athos y Tango es inédito en la entidad y probablemente en el país, pues aunque se han realizado actos públicos para jubilar perros policía o despedir a perros de trabajo que fallecieron realizando su labor, ninguno de estos casos ha tomado la relevancia nacional, como sí lo ha hecho la historia de estos canes.
No sólo los cuerpos de emergencia se han organizado para homenajear a los perros rescatistas, sino también la sociedad civil se ha concentrado para protestar por los actos de crueldad contra Athos y Tango, y todos los perros del mundo.
Esta semana, cientos de personas se reunieron en el Jardín Guerrero para realizar una caminata nocturna rumbo a Plaza de Armas, con la que mostraron su indignación y exigieron a las autoridades dar con los responsables del envenenamiento de ambos perros de trabajo.
Durante la caminata, varias familias acompañadas de sus compañeros peludos, portaron carteles para pedir “no más maltrato animal”, “No más crueldad”, “Ni una patita menos”.
El contingente conformado por cientos de personas y decenas de perros de todas las razas y tamaños, se concentró en Plaza de Armas y frente a las puertas de la Casa de la Corregidora rindieron un minuto de aplausos para agradecer la labor de Athos y su compañero Tango.
“Es importante que este tipo de movimientos se den en Querétaro, el caso de los perros rescatistas se ha viralizado porque son pérdidas muy valiosas, eran perros que ayudaban a toda la sociedad mexicana, pero ese no es el único caso, todos los días cientos de perros y otros animales son envenenados, maltratados, olvidados y abandonados, las penas para castigar la crueldad animal deben endurecerse, eso esperamos de las autoridades”, comenta Carmen González, quien asistió a la caminata acompañada de su familia y de sus dos mascotas mestizas.
Athos, de raza Border Collie y de aproximadamente 4 años de edad, estaba en el top cinco a nivel nacional entre los perros certificados ante la Organización Internacional de Perros de Búsqueda y Rescate, y también era un especialista acreditado ante la Cruz Roja Mexicana en Búsqueda y Rescate Urbano. “Era un perro excepcional”, cuenta en entrevista Andrés Juárez Morales, coordinador estatal de Socorros de Cruz Roja.
En tanto, Tango era un pequeño Yorkshire que formaba parte de la Cruz Roja y cuya labor era de asistencia emocional a personas con altos niveles de estrés y de ansiedad después de vivir algún suceso trágico.