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Martha Berenice Hernández Amaya apenas levanta la vista a lo que sucede alrededor. Se concentra en la elaboración del muñeco de perrito, cuyo modelo es una fotografía que un cliente le envió. Debido a la pandemia de Covid-19, Martha vio reducida su actividad como estilista a domicilio, por lo que incursionó en la elaboración de réplicas de mascotas para aquellas personas que quieren conservar el recuerdo de sus compañeros de cuatro patas.
La mujer elabora una réplica de un perro de la raza Beagle. Trabaja de frente a su teléfono celular, en donde observa la foto del can y copia todos los detalles. Con paciencia arma poco a poco la figura.
Ella comenta que de oficio es pintacaritas, además hace manualidades en crochet, así como las réplicas de mascotas. Cuenta que su labor mueve emociones, “Son sentimientos que uno mueve… Muchas veces existimos personas que queremos tanto a nuestras mascotas que los vemos como si fueran parte de nuestra familia. Me encanta mover emociones al hacer las réplicas de los perritos.
“Desde que empezó la pandemia, empecé [con las réplicas de las mascotas]. Soy estilista, pero me dedico a dar servicio a domicilio y la gente empezó a cerrar puertas por el temor a la pandemia. Tuve que buscar otras alternativas estando en casa encerrada.
“Aprovechando que sé tejer aprendí esto, que es algo que no se ve en Querétaro ni en México, sólo en el extranjero. Incluso, los tutoriales están en chino. Comencé a observar y a practicar. Gracias a Dios a la gente le ha gustado mi trabajo y me han seguido”, sostiene.
Explica que en hacer la réplica de un perrito de pelo corto tarda hasta tres días; sin embargo, cuando son más complicados por el pelaje de la raza el tiempo de elaboración es mayor.
“Soy muy dedicada porque hasta le checo la panza, los lunares, el lagrimal, si tiene alguna herida, si tiene alguna cicatriz. Soy muy observadora y obsesiva, para que quede lo más parecido que se pueda. Y sí, les pido una fotografía”, asevera.
Además de esta manualidad, Martha realiza otras actividades. En su puesto en Plaza del Parque las personas se acercan a ver distintos productos que llaman la atención, como diademas, accesorios y los perritos.
Junto al Beagle, en el que trabaja Martha, hay un Rottweiler que está en proceso. La artesana da los últimos detalles a la pieza del Beagle.
Asegura que la manualidad ha tenido éxito, pues las mascotas juegan un papel importante en la vida de las personas. Cada vez son más quienes ven a sus perros, gatos o algunas otras especies, como seres amados y muy importantes.
“La gente, supongo, quiere tanto a sus perros, a sus mascotas. La mayoría de la gente me dice que sus mascotas ya no están, que si me sirve una foto (para hacer la réplica) o bien con la misma foto me hago la idea y como he tenido varios perritos buscamos lo más parecido a sus mascotas. Lo importante es su carita. Puede ser mascota viva o mascota muerta”, comenta.
Entre las creaciones que le han encomendado hay perros, gatos y conejos, pero pueden hacer un cuyo, hámster, cualquier especie de animal. Reconoce que con los gatos tiene que ser más cuidadosa, porque son “más rayados”, por lo que “le sufre un poco más”, debido al pelaje y ojos de los felinos.
Confiesa que cuando no encuentra ojos para las figuras los tiene que pintar usando materiales como acrílico y barnices para las uñas, con el propósito de igualar el color de los ojos de los gatos. Lo hace con gusto porque le agrada pintar.
“Muñecos son muñecos y cuando son mascotas con plumas es complicado. Hice también un dragón que tuve que buscar las plumas y que hice en esta técnica, pero no es difícil, lo difícil son los gatos porque son rayados. De hecho, de repente me salen raritos, pero la gente ha quedado contenta. No han regresado para decirme que le ponga más pelo, o que le ponga más color”, sostiene.
Agrega que muchas ocasiones las personas le preguntan cómo pueden aclarar u oscurecer sus réplicas, aunque hasta ahora no ha pensado en dar clases de esta manualidad.
“La verdad, no he salido, la gente no me ha visto trabajar. La idea de estar en Plaza del Parque [participando en una feria artesanal] es para obtener más mercado, darme a conocer un poco más y vender mis productos, porque de esto estoy viviendo. El trabajo de estilista bajó mucho y la verdad esto me lleva mucho tiempo, estoy más en mi casa, veo a mis hijos y estoy más en hogar”, comenta.
Dice que tanto el estilismo como la elaboración de réplicas de mascotas le gustan, son actividades que disfruta.
Con ambas actividades, añade, “me relaciona con personas. La transformación [de la gente], haciéndose un pedicure, un manicure, los hace sentir bien, la relación con la gente es padrísima. Eso, el mover sentimientos, es padre. Me gusta cuando me dicen que trabajo bien.
“Me encanta mover sentimientos por todas partes [cambiando la imagen de alguien o recreando a una mascota especial]. De eso se trata mi trabajo, de mover sentimientos y disfruto mucho hacer esto, porque me gusta mucho el arte, transformar”, precisa.
Destaca que las réplicas las quiere seguir haciendo, dejando de lado el estilismo a domicilio, pues ha encontrado en esta actividad una forma de mover los sentimientos de las personas y darles una alegría al tener una réplica de sus mascotas amadas.
