Portando cubrebocas y caretas de protección y gel antibacterial, cientos de alumnos volvieron a las aulas en Querétaro para tomar clases presenciales.

Cada plantel en la entidad puso a prueba sus protocolos de salubridad, planeados con meses de anticipación, en los que el uso de gel antibacterial, la toma de temperatura y el uso de cubrebocas, fueron algunos de los requisitos necesarios para ingresar a las escuelas.

“Nada suple el trabajo del maestro en las aulas”
“Nada suple el trabajo del maestro en las aulas”

En la Secundaria Técnica número 9, en la colonia Lomas de Casa Blanca, alrededor de 600 estudiantes volvieron a las aulas, divididos en turnos matutino y vespertino. Estos 600 alumnos equivalen a sólo el 30% de los alumnos totales de la secundaria, el otro 70% seguirá con clases en línea, explicó la subdirectora del plantel, Sandra Verónica Molinero Félix,

Esta es una escuela de doble turno, son más de 1700 alumnos en total. Tuvimos que cuidar que los salones fueran sólo de 15 o 16 alumnos, porque no es sólo separarlos por bancas, sino que debemos cumplir con el metro y medio de distancia que nos marca el protocolo.

“El 70% de los alumnos de esta escuela seguirán tomando clases a distancia, porque debemos respetar el cupo máximo de alumnos en los salones”, detalló la directora.

Son aproximadamente 600 alumnos los que llegarán a clases presenciales en los dos turnos. Es un trabajo muy duro para todo el personal, pero tenemos muy buena comunicación no sólo con USEBEQ, sino también con los padres de familia”, explicó la docente.

En esta secundaria, desde las primeras horas del día se observó movimiento de familias en las calles aledañas. Algunos estudiantes llegaron caminando, otros llegaron en auto o en camión. Los estudiantes ingresaron a las escuela 15 minutos antes de las 7:00 horas, con el objetivo de evitar aglomeraciones al ingresar al plantel.

Antes de entrar a cada estudiante se le midió la temperatura corporal y se les proporcionó gel antibacterial, a través de indicaciones marcadas en el pizarrón, los estudiantes pasaron hasta el patio principal, donde formaron filas, dependiendo del grupo al que pertenecieran.

Los primeros alumnos en la fila sostenían una pequeña pancarta con las leyendas “Primero A”, “Segundo C” o “Tercero B”, según fuera el caso.

Una vez organizados, los alumnos ingresaron a las aulas, mismas que ya habían sido sanitizadas a profundidad.

“Nada suple el trabajo del maestro en las aulas”
“Nada suple el trabajo del maestro en las aulas”

Los padres de familia también tuvieron asignaciones especiales, para agilizar el ingreso de los alumnos al plantel; algunos se encargaron de desviar el tráfico vehicular, mientras otros monitoreaban que los estudiantes cumplieran con los filtros de salubridad y que usaran correctamente el cubrebocas.

Una vez que terminó el turno matutino, los profesores coordinaron la salida de los primeros alumnos, para dar paso a los estudiantes del turno vespertino; para esto, cada grupo utilizó puertas distintas para evitar aglomeraciones, y en este turno, los filtros de salubridad fueron los mismos.

Para el profesor de Ciencias Naturales, Eduardo Raga, quien imparte clases a los alumnos de tercer grado, regresar a las clases presenciales era algo que ya ansiaban no sólo los estudiantes, sino también los docentes.

El profesor señaló que los jóvenes estudiantes han mostrado buena disposición al momento de cumplir con los requisitos sanitarios.

Los muchachos ya están acostumbrados, ya llevan más de un año de estar escuchando las normas que deben cubrir, el uso de cubrebocas y de más. A las familias les pedimos que cumplan las normas y los protocolos, ya todos sabemos lo que tenemos que hacer".

“Yo todo el año pasado me la pasé dando clases en línea, y estos nuevos alumnos que llegaron a clase les pregunté qué forma les gustaba más, si las clases presenciales o las clases en línea, y todos me dijeron que prefieren venir a la escuela, ninguna tecnología puede suplir el trabajo del maestro en aula con los alumnos. La verdad es que yo como maestro también extrañaba estar en clases presenciales”, afirmó.

Aunque la lluvía intermitente durante la mañana de este lunes generó algunos cambios en los filtros de salubridad, la subdirectora Sandra Verónica Molinero reconoce que los simulacros realizados previamente sirvieron de mucho.

“Esto es el resultado de un trabajo muy arduo, tuvimos que preparar los protocolos con USEBEQ, capacitamos al personal administrativo y docente, los padres de familia también tuvieron capacitación y ayudaron en las jornadas de limpieza”, comentó la subdirectora.

Ingrata sorpresa

Algunos padres de familia se llevaron una sorpresa al descubrir que el plantel al que acudiría su hijo, había cancelado el regreso a clases de última hora.

Ese fue el caso de la Escuela Secundaria número 1, en la colonia La Era, que según el personal docente, USEBEQ no completó las mejoras en la escuela y, por tanto, los alumnos no pudieron volver a clases.

El señor Roberto y su hijo Vicente, quien ingresaría a primer grado, llegaron desde Cerrito Colorado hasta la secundaria y se encontraron puertas cerradas. “Avisamos por el chat que se suspendía el regreso a clases hasta nuevo aviso, porque USEBEQ no terminó de reparar las ventanas”, comentó uno de los docentes del plantel.

De acuerdo con la Secretaría de Educación estatal, a partir de este lunes serán 809 escuelas de nivel básico (346 públicas y 463 privadas) las que regresarán a clases presenciales, además de 91 de nivel medio superior y 24 del superior.

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